Centennials prefieren la capacidad de influencia por encima del dinero

La Universidad Jorge Tadeo Lozano y la firma Sancho Bbdo realizaron una investigación sobre el comportamiento de los centennials en el país, utilizando como ejes la costa atlántica y Bogotá y sus alrededores. Carlos Andrés Arango, investigador de la Tadeo explicó los hallazgos en ‘Centennials, una generación sin etiquetas’.

¿Qué información nueva reveló el estudio que llevaron a cabo ambas organizaciones en Colombia?
El estudio nos permitió tener datos locales sobre la generación, lo cual antes nos se había podido obtener. Nuestra investigación de dos años nos permitió conocer a los jóvenes adolescentes de Bogotá, Santa Marta, Barranquilla y Cartagena.

¿Qué comportamientos son los más recurrentes en esta generación?
Abunda la individualidad en lo que trabajan. Además, son jóvenes empoderados, proactivos, que son capaces de emprender cualquier causa o negocio.

¿Cuáles son los cambios en lo económico frente a las demás generaciones?La percepción del dinero cambia, dejó de ser un camino para obtener éxito. Ellos vienen construyendo la concepción de ser exitosos en la importancia de influenciar a los demás sobre aspectos como el dinero.

¿Con esta generación se cambia la concepción de empresa y de trabajo?
Es difícil porque esta es una generación que quiere ser parte de una sociedad que no anule su individualidad. Se inclinan por compañías más incluyentes, para ellos no hay etiquetas y todos son iguales. Casos como la compañía Zappos y su filosofía de gestión abierta “holacracia”, hace que en un futuro cercano haya una firme y funcional forma de administrar las empresas con políticas de felicidad al interior. No es el objetivo sino el origen de los buenos resultados financieros.

¿Qué tan importante es la felicidad para la generación?
Precisamente en el libro escribimos algo a cerca de este punto. Para el centennial es más importante alcanzar la felicidad y luego el dinero, entendiendo la necesidad de disfrutar cada vez más de la vida.