Conozca cómo va el avance en la transformación del liderazgo femenino en el país

En Colombia, el liderazgo femenino está impulsando una transformación significativa dentro de las organizaciones. Este tipo de liderazgo se caracteriza por ser inclusivo, fomentar la participación y dar voz a todos los integrantes de un equipo, permitiendo la creación de identidades colectivas e inspirando a nuevas mujeres a asumir roles de dirección.

El impacto del liderazgo femenino trasciende su contribución individual, ya que las mujeres poseen habilidades desarrolladas que las convierten en líderes estratégicas y empáticas. Estas características, conocidas como habilidades blandas, son esenciales en los entornos laborales modernos, pues promueven la comunicación efectiva, la resolución de conflictos y el trabajo en equipo, claves para alcanzar los objetivos empresariales.

La Organización Internacional del Trabajo, OIT, respalda este enfoque con cifras contundentes: empresas que han integrado mujeres en puestos de dirección han visto un aumento en sus beneficios entre el 5% y el 20%. Además, un 54% de las organizaciones reportaron mejoras en creatividad e innovación, mientras que un 57% afirmó que la presencia de mujeres en cargos directivos facilita la atracción y retención de talento.

En Colombia, esta transformación también ha contribuido a crear ambientes laborales más justos y equitativos, donde las perspectivas femeninas complementan las de sus pares masculinos. Este equilibrio resulta en decisiones más acertadas en momentos de crisis, una gestión más eficaz de los equipos de trabajo y resultados sostenibles en el tiempo.

El liderazgo femenino no solo está redefiniendo las estructuras tradicionales en las empresas colombianas, sino que también está marcando un camino hacia una cultura organizacional más equitativa, creativa y competitiva, demostrando que incluir a las mujeres en la toma de decisiones no es solo una apuesta por la igualdad, sino una estrategia de éxito empresarial.

En relación con el liderazgo, Natalia Zuleta, escritora y speaker, comenta que: "¿cuáles son esas cualidades femeninas que pueden aportar a un liderazgo sostenible? Un liderazgo que pueda permanentemente evolucionar en la construcción de una mejor versión de seres humanos y por ende de una mejor sociedad. Podemos reconocer características de las mujeres que emanan de atributos propios del género, aprendizajes culturales y roles sociales. La pregunta que cabe es ¿qué pasaría si a las habilidades establecidas desde la administración para ser un buen líder se sumaran algunas cualidades de lo femenino que enriquecieran un proceso de transformación?".

Y agrega que: "el futuro nos demanda no sólo preparación en los aspectos técnicos y profesionales del trabajo, estos son fácilmente alcanzables en la era de la información. La diferencia estará en el trabajo interior que complemente los conocimientos disciplinarios, en la entereza y fortaleza para afrontar la complejidad de un mundo cambiante y veloz".