Conozca los consejos que le pueden ayudar a lidiar con colaboradores complicados
miércoles, 11 de diciembre de 2024
Entre los síntomas más comunes de un empleado conflictivo se encuentran la falta de colaboración y la defensa constante de sus acciones
Los empleados conflictivos pueden presentar desafíos para las organizaciones, ya que sus comportamientos negativos afectan el ambiente del grupo y muy posiblemente el rendimiento general.
Es fundamental la identificación de ellos, estos empleados suelen interrumpir reuniones, emitir comentarios fuera de lugar, y exhibir una actitud desafiante hacia la dirección o sus compañeros.
En término económicos, un informe de 2015 de la Escuela de Negocios de Harvard calculó que mantener a un "trabajador tóxico" en la nómina puede costar a una empresa en promedio más de US$ 12.000 al año.
Entre los síntomas más comunes de un empleado conflictivo se encuentran la falta de colaboración, la defensa constante de sus acciones y una negativa a aceptar responsabilidades. Además, suelen mostrar una actitud defensiva cuando se les cuestiona o se les propone una solución, dificultando la resolución de conflictos.
Estos empleados también tienden a ser poco flexibles y muestran una resistencia a cambiar o adaptarse a nuevas ideas y enfoques, lo que puede obstaculizar el desarrollo del equipo y la empresa en general.
Paul Penichet, Huge Learning & Development LatAm Deployments, realizó una serie de pasos o consejos que se pueden seguir en este tipo de casos.
Argumente
Cuando se debe comunicar una decisión a un empleado conflictivo, es importante explicar de manera clara las razones detrás de ella. Aunque inicialmente puedan rechazar la explicación, es probable que, con persistencia, logren entender el motivo y la justificación de la decisión.
No se rebaje
Los empleados conflictivos pueden intentar sacar a otros de su compostura a través de nerviosismo o frustración. Es fundamental mantener la calma y mostrar que se tiene un buen manejo de la situación y conocimiento del perfil del empleado.
Evite el chantaje
Nunca se debe aceptar una propuesta que ponga los intereses personales del empleado por encima de las necesidades organizacionales. Es crucial llegar a acuerdos que beneficien a ambas partes, pero sin caer en manipulaciones o chantajes emocionales.
Afronte el problema
Es importante no ignorar los problemas causados por empleados conflictivos. Reconocer la situación y abordar la causa subyacente de su comportamiento contribuye a encontrar soluciones efectivas y evitar que la dinámica del grupo se vea afectada.
Ofrezca una posible solución
No se trata de cumplir todos los deseos del empleado, pero ofrecer ayuda para mejorar su comportamiento puede ser beneficioso. Este proceso requiere tiempo y paciencia, y aunque puede ser tentador abandonar, el esfuerzo por mejorar la situación puede traer resultados positivos.
Termine el acuerdo
Si después de intentar resolver la situación a través de comunicación, el comportamiento del empleado sigue afectando negativamente la dinámica del grupo, es importante considerar la opción de finalizar la relación laboral para preservar el ambiente de trabajo.