Conozca los diferentes tipos de contratación para emplear estudiantes en práctica

El primer semestre del año es clave para los procesos de contratación en las empresas. Entre ellos, la asignación de cupos para practicantes, una de las dinámicas de contratación que cuentan con diferentes mecanismos de convenios.

Entre las posibilidades, hay dos tipos de vínculos vigentes en el mercado. El primero se trata de las pasantías, sistema con el cual a través de un convenio entre la institución educativa y la compañía, se genera el espacio para que el estudiante continúe su formación académica.

En este sentido, y por ser una continuación de la educación, el estudiante no está realizando una labor, por lo que en esta modalidad no existe un pago como remuneración salarial, según Luis Suárez, abogado experto en temas laborales.

“La normatividad al respecto no es muy clara, lo que permite que las compañías generen cupos como parte de la extensión de la formación de los estudiantes bajo convenios con las oficinas de prácticas y egresados de cada facultad”, comenta Suárez, quien recalca que “hay casos en que las firmas dan un auxilio de transporte o algunas bondades no estipuladas”.

Existe una segunda figura que sí cuenta con reconocimientos salariales y corresponde a los contratos de aprendizaje. Estos permiten incorporar a aprendices del Sena y a otros estudiantes universitarios de acuerdo con los requisitos de ley para las empresas.

Acá de nuevo se generan diferentes modalidades de contrato de acuerdo a cómo se debe pagar al practicante.

Los apoyos financieros otorgados a estudiantes del Sena tienen dos etapas: en la primera, el estudiante recibe 50% de un salario mínimo legal vigente, mientras cumple su etapa lectiva; y un reconocimiento entre 75% y 100% del salario cuando pasa a la etapa práctica.

Esta entidad tiene siete alternativas de contratación o participación laboral en la etapa de producción del estudiante, entre las que están: pasantía, contrato de aprendizaje, apoyo a entidades, vínculo laboral, proyectos productivos, unidades productivas familiares o monitoría. Los pagos aquí dependerán también de la tasa de desempleo, pues cuando esta sea inferior a los dos dígitos, el reconocimiento a los practicantes será de un salario mínimo legal vigente completo.

Entre tanto, los estudiantes universitarios cuentan solo con el modelo de contrato de aprendizaje con un salario a convenir con la compañía. Al respecto, Suárez indica que los abogados de cada firma y/o universidad, se encargan de redactar los contratos de acuerdo a sus necesidades.