Gerenciar para la industria 4.0
miércoles, 15 de agosto de 2018
Cómo el sector alimentos aprovecha la nueva revolución industrial
Carlos Álvarez
La industria 4.0 es una nueva tendencia que explora la fabricación inteligente, con sistemas integrados y flexibles que responden para satisfacer las demandas y condiciones cambiantes de las plantas de producción, adaptando las operaciones a las necesidades de cada cliente.
Justamente, la industria nacional está asumiendo este camino de la industria 4.0: la nueva revolución industrial, que llega de la mano de la producción inteligente, de la digitalización, de la nube, del internet de las cosas y de las soluciones inteligentes tanto para las fábricas como para el perfeccionamiento de los procesos.
Una de las industrias que mayor provecho ha sacado de esta nueva dinámica, por ejemplo, es la de alimentos y bebidas, pues este nuevo enfoque permite cumplir con las exigencias del mercado y de los consumidores, además de suplir las necesidades globales como es el mejoramiento de la seguridad alimentaria, para evitar cualquier tipo de riesgo y para dar garantías a quienes regulan y acceden a los productos.
Expongo un listado de los siete factores que benefician a la industria de alimentos y bebidas, si sabemos implementar y canalizar las posibilidades que nos da el mundo digital y la industria renovada, esa que es llamada la industria 4.0:
1. Conecta e integra los equipos de producción, permitiendo que las máquinas durante todo el proceso se comuniquen y se auto-sincronicen, conduciendo a mayores ahorros por eficiencias y mayor productividad.
2. Mayor eficiencia en las cadenas de suministro, con la posibilidad de hacer un mejor seguimiento de los pedidos, cruzando la información con los inventarios, recortando de ese modo los plazos de la logística y agilizando la llegada de los productos al mercado.
3. Garantía de trazabilidad absoluta, con mucho mayor acceso a la información para visibilizar la totalidad de los procesos de producción.
4. Mantenimientos predictivos, un operador puede extraer información de las máquinas y ponerlas en la nube, lo que permite un análisis mucho mayor y oportuno.
Se pueden hacer predicciones de los equipos para tomar decisiones, reduciendo tiempos de inactividad, trasladando producción a otros equipos y solicitando despacho de piezas de recambio con gran anticipación.
5. Adaptación a los algoritmos de aprendizaje automático, realizando cálculos que ayudan a predecir el funcionamiento futuro de la planta, anticipándose a los problemas y mejorando las eficiencias de producción.
6. Utilización de realidad virtual, con tecnología “wearable” para los técnicos. Cualquier problema puede ser resuelto por un experto, incluso, si está sentado a miles de kilómetros de distancia.
7. Planeación estratégica a futuro, permitiendo a los productores de la industria de alimentos y bebidas por intermedio de la realidad virtual, simular un proceso completo, ver los pallets completos y simular la producción de un año completo, etc.
Hoy, podemos evitar cientos de riesgos gracias a la industria 4.0, podemos potenciar el alcance de los productos y esto, sumado a nuestra capacidad agrícola, puede llevar a Colombia a ser lo que siempre ha deseado ser: la despensa del mundo.