La industria bancaria mundial mira hacia los emergentes
sábado, 3 de noviembre de 2012
Richard Lumb
La industria de la banca global enfrenta dos verdades opuestas. Por un lado, pese a las actuales preocupaciones económicas, en los mercados emergentes es donde yacen las oportunidades de crecimiento de largo plazo.
Por otra parte, la crisis de la eurozona ha forzado a los bancos a repensar sus inversiones en numerosos mercados, incluyendo los de las economías emergentes. El resultado es un abismo de oportunidades - un vacío listo para ser llenado por bancos de los mundos emergentes y desarrollados.
Ampliamente, libres de la deuda y desapalancamiento que han socavado el crecimiento en Occidente, las economías emergentes de Asia, África y America Latina se mantienen entre las pocas áreas que experimentan un crecimiento relativamente saludable.
De hecho, el Banco Mundial espera que en el próximo año las economías emergentes crezcan a una tasa casi cuatro veces mayor que la del mundo desarrollado.
Es por ello que una combinación de bancos occidentales saludables y agentes que operan dentro y en torno a los mercados emergentes está buscando oportunidades más allá de la eurozona. Sus movimientos potencialmente pudieran crear una nueva clase de líderes de la banca global para la próxima década. ¿Quiénes podrán ser estos líderes?
Banvos japoneses
En algunos aspectos, la reducción de gastos de los bancos europeos guarda similitudes con el suplicio de las instituciones japoneses en la década de 1990, cuando la contracción de la economía nacional debilitó a sus gigantes de la banca internacional.
Conforme los japoneses se refugiaron en su propio territorio, los bancos occidentales entraron al escenario mundial. Ahora la situación se ha revertido.
Varios de los bancos más importantes de Japón con superávits de depósitos nuevamente se están expandiendo internacionalmente y están comprando carteras crediticias de bancos occidentales. Entre los operadores más importantes se encuentran SMBC, Mitsubishi UFJ y Mizuho.
Operador de mercado emergente
El vacío bancario podría llenarse desde adentro, conforme la retirada europea provea oportunidades inusitadas para los bancos de los mercados emergentes que busquen reemplazar instituciones internacionales.
Tomemos por ejemplo a Sberbank, de Rusia: el año pasado accedió a comprar las operaciones del Volksbank, de Austria, en ocho países de Europa Oriental por aproximadamente US$800 millones.
Es así como las instituciones que llenen el vacío exitosamente para capturar el futuro crecimiento de los mercados emergentes se unirán a una nueva clase de líderes globales de la banca.