Ocho errores comunes en la foto de LinkedIn

Primera lección que se debe aprender: LinkedIn no es Facebook. La foto de perfil de LinkedIn puede parecer un detalle sin mayor importancia, pero es muy tomado en cuenta por los reclutadores.

Es tu carta de presentación, después de todo. Según el portal La Vanguardia, una imagen correcta en la red social del trabajo puede abrirte muchas puertas.

“Una buena foto permite destacar sobre el resto y que llegue la oferta deseada”, reza el sitio, y no deja de ser cierto.

A continuación los ocho errores que debes evitar en tu foto de perfil de LinkedIn:

La imagen del recuerdo no es la mejor opción, la recomendación es utilizar una imagen reciente.

No intentes revelar tu lado oscuro. Utilizar excesivas “sombras artísticas” en tu foto de LinkedIn puede lucir intrigante, pero nadie quiere contratar a alguien a quien no puede verle la cara.

Solo se vive una vez, pero difícilmente podremos sobrevivir sin trabajo. Las fotos de fiesta no son las adecuadas para esta red, aquí debes mostrar tus habilidades profesionales, no las de juerga.

LinkedIn no es Tinder. El objetivo es encontrar trabajo, no al amor de tu vida. Si tu foto de perfil sigue la línea de una web de citas, deberías cambiarla.
Relajémonos. Colocar fotos con el ceño fruncido o renegando para aparentar “seriedad” solo nos perjudica. Recuerda que ningún jefe querrá conocer a un monstruo amargado.

La única forma de que tu mascota aparezca en tu foto de perfil es que seas veterinario. De otra forma, se aconseja dejar a los animales fuera de LinkedIn.
Las selfies son muy populares, lo entendemos pero LinkedIn no es el lugar preciso para ellas. En esta red social queremos lucir profesionales, incluso con la cámara. Una selfie da la impresión de un aficionado.

Pero el pecado imperdonable es no colocar foto de perfil. Si no cuentas con una foto, olvídate del trabajo ideal.