Si bien nos es imposible tampoco es muy común encontrar empresas que basen sus acciones en la sostenibilidad a través de estrategias que le apuesten al desarrollo económico a largo plazo mientras protegen los elementos medioambientales y socio culturales.

Mis primeros pasos en el mundo de la sostenibilidad fueron a través de un emprendimiento en 2014, el cual me permitió explorar y comprender el mundo la moda sostenible. En ese entonces, más desde lo ambiental y lo social que desde el eje económico.

Desde entonces vengo muy inquieta por conocer marcas sostenibles desde este componente y por eso vengo siguiéndole los pasos a una marca local de origen familiar fundada por tres hermanos paisas hace 18 años, que ha venido creciendo de manera sostenida y consciente en el mercado de la moda colombiana y que justo acaba de abrir puertas en el exterior a través de un modelo de co inversión con otras 17 marcas de diseñadores colombianos unidas por su alma sostenible, -que no solo lo hace desde sus procesos productivos cuidando y respetando el medio ambiente sino que teniendo un afecto especial por los componentes socio cultural y económico-.

Se trata de Wanitta, una marca de moda ética y responsable que logra actuar de manera equilibrada entre los tres ejes de la sostenibilidad: social, ambiental y económico.

Estoy hablando de una marca que verdaderamente refleja el concepto de moda ética hecha en Colombia y que hace poco llegó a Miami, FL, mediante la apertura de una tienda física multimarca que alza la bandera colombiana de la sostenibilidad en el mundo.

Hace poco en conversaciones con Mónica Agudelo, cofundadora y directora de crecimiento de Wanitta, me contaba que “la marca deja una huella positiva en cada aspecto de su operación, desde la experiencia del cliente hasta el bienestar de sus colaboradores, que además promueve un trabajo digno y realiza campañas para promover la generosidad y el servicio a los demás, convirtiéndose en un referente de moda ética y una marca que es instrumento de amor y servicio.

Es increíble ver cómo una marca familiar local, hoy en día genere aproximadamente 70 empleos directos y más de 200 indirectos en nuestro país y que en su proyección con la conquista del mercado estadounidense busque superar dichas cifras, ofreciendo una oportunidad de trabajo significativa para los colombianos y la comunidad latina en EE.UU.

En definitiva, estas son acciones valientes que en el mundo de la sostenibilidad tenemos que celebrar con orgullo para lograr que otras empresas, incluso aquellas de mayor tamaño se logren inspirar y dar un verdadero y absoluto salto a la sostenibilidad global.