Uno de los objetivos de los impuestos, además de cubrir gastos de funcionamiento y deuda pública, entre otras cosas, es enfocarse en la eficiencia del uso de los recursos para mejorar la distribución del ingreso. La principal medida para medir la distribución del ingreso para datos ordenados es el coeficiente de Gini que, si es cercano a 1 es muy mala distribución y cercano a 0 es muy buena distribución del ingreso.
En un excelente y muy técnico artículo titulado “Política fiscal, pobreza y desigualdad: un modelo de micro-simulación para Colombia” de David Rodríguez Guerrero de la Universidad Externado de Colombia y de la Universidad de Essex, se analizan algunas cuestiones importantes de las relaciones entre las variables planteadas en el título.
Aparte de la novedosa metodología (Colmod que se hace con simulaciones) el artículo llega a muy importantes conclusiones, entre las cuales están: el coeficiente gini en Colombia pasa de 0,587 (ingreso de mercado) a 0,5638 (ingreso disponible= ingreso de mercado - impuestos + transferencias), lo que indica que, después de impuestos y transferencias, el gini solo se reduce 2,2 pp, indicando una pobre redistribución del ingreso en Colombia y un mantenimiento de la desigualdad. El autor compara esto con los 28 países de la Unión Europea, en los cuales el coeficiente gini pasa de 0,505 a 0,296, una reducción de 21 pp, lo que indica la eficiencia en el uso de los recursos en la disminución de la desigualdad.
Por otro lado, la población del decil 1 de ingresos (10% de la población de menores ingresos) aporta 8% de estos en impuestos directos y el decil 10 (10% de la población con mayores ingresos) aporta 5%. Esto indica que los impuestos directos son regresivos en Colombia. además, en cuanto al IVA, la proporción de pago de estos impuestos en el decil 1 es de 20%, y para el resto de la población el aporte es de 5% promedio, lo que indica que es otro impuesto regresivo. Según el análisis del autor, la población en el decil 1 paga (proporcionalmente con los demás deciles) más en impuestos que lo que recibe en transferencias monetarias, cuestión que muestra la regresividad de la diferencia (transferencias - impuestos).
Un punto importante en este trabajo es que los mayores subsidios vía pensiones (Colpensiones) van dirigidos a los deciles altos de la población (entre los cuales están muchos excongresistas y exmagistrados) y esto contribuye a perpetuar las desigualdades. Y gran parte del déficit fiscal se explica por este rubro de pago de altas pensiones. En otras palabras, las políticas fiscales están muy relacionadas con las políticas pensionales.
Por todo lo anterior, en el proyecto de reforma tributaria se justifica la propuesta de devolución del IVA a los deciles I y II (20% más pobre), pero debería ir acompañada de una propuesta para ir eliminando las altas pensiones subsidiadas de los deciles altos, la eliminación progresiva de las exenciones de impuestos a las grandes empresas y las altas exenciones en las zonas francas, que son anticompetitivas.
Si se quiere que en Colombia el manejo del presupuesto nacional disminuyan las desigualdades, pues hay que cobrarle a los que tienen y devolverle a los que no.