A los seres humanos, según su país de origen, los identifica el número de la cédula, del pasaporte, de la licencia de conducción y hasta el de la tarjeta de crédito.
Alrededor de Dios encontramos un gran número de números, cifras, ecuaciones y hasta fórmulas matemáticas para identificar muchas creencias, hechos y revelaciones.
Vamos a recordar algunas, sin ningún orden ni jerarquía. Sin análisis teológicos. Solo de una manera desprevenida, prosaica, simple y parroquial, teniendo en cuenta las narraciones bíblicas en sus diferentes libros.
Para arrancar, se habla de la Santísima Trinidad (Padre, Hijo y Espíritu Santo) tres personas distintas y un solo Dios verdadero. También encontramos en los textos bíblicos las menciones de las 11.000 vírgenes, los 4 evangelistas, los 10 mandamientos, los 14 pasos del viacrucis, las 10 plagas de Egipto, los 12 apóstoles y las 12 tribus de Israel.
El 40 es un número muy particular para los creyentes cristianos, pues son 40 los días que Jesús oró en el desierto, 40 los días y las noches que duró el diluvio universal, y 40 los años que duraron los israelitas desde salida de Egipto hasta llegar a la tierra prometida.
El 7 es otro número que se repite mucho y con varios significados como las 7 iglesias de las que habla el Apocalipsis, los 7 días de la creación, las 7 canastas de la multiplicación de los cinco panes y los dos peces, y los 7 pecados capitales. Las obras de misericordia son 7 corporales y 7 espirituales, y los sacramentos son 7.
El número 7 también los encontramos en perdonarás 70 veces 7, palabras de Jesús a Pedro; hay que visitar en Semana Santa 7 monumentos, el sermón del viernes Santo tiene 7 palabras, y se quedan muchos otros hechos y citas del número 7 por fuera, para no alargar el cuento de este número.
Una de las explicaciones de la repetición del número 7 es que se considera el número de la perfección. Así como se dice que el número 1 es de Dios (único), el 2 de la dualidad, el 3 de la totalidad del tiempo (pasado, presente y futuro), el 4 de los puntos cardinales, el 5 de una cantidad indefinida y del 6 se dicen muchas cosas.
¿Se salvarán solo 144.000?
Hay otra cifra apocalíptica que llama mucho la atención y que señala que al final del mundo se salvarían solo 144.000 creyentes. Un número mínimo si tenemos en cuenta que proyectando a hoy los cálculos que citaba el padre Alfonso Llano en sus columnas, han pasado por este planeta Tierra más 100.000 millones de almas.
El 144.000 sale de multiplicar 12 tribus de Israel por 12 apóstoles y por 1.000 que significa gran cantidad, es decir una multitud.
El padre Ramón Zambrano, director del canal católico de televisión Cristovisión, explicó en una oportunidad que en materia de cifras e interpretaciones bíblicas hay que tener en cuenta que el lenguaje ha sido muy distinto en oriente y occidente. Por ejemplo, dice, según la Biblia (Génesis) el mundo fue creado en 7 días, y para los occidentales literalmente son 7 días, pero en la Biblia el 7 significa mucho (plenitud). Y, el 1.000 era una manera como los judíos magnificaban las cosas. Es como decir hoy “te amo hasta ene mil o te amo de aquí a la luna”, puntualizó esa vez Zambrano.
Entonces, la Biblia está construida desde el mundo oriental con un sentido muy profundo y a veces hasta con un lenguaje muy técnico. Para el padre Zambrano es claro que los que llegarán al Cielo no serán solo 144.000 sino que “con la sangre de Cristo se salvarán innumerables creyentes”.
El temible y diabólico 666
Pero hay otra cifra muy temeraria. Es el 666. El llamado número de la bestia. Para unos, esta cifra es el resultado de un juego bíblico, donde se oculta el nombre del emperador Nerón. Para otros, es como un acróstico que corresponde en latín a las seis letras de César (Caesar).
Para los entendidos en temas de la iglesia, una persona que no está formada en mentalidad bíblica y sí está metida en el fundamentalismo, ve y cree que el anticristo está marcado con el 666.
El padre Ramón comentó también que la fuerza del mal es el anticristo y que hay leyendas rosa y negra, ciencia ficción, ocultismo, magia, la televisión y el cine que construyen una nueva manera de entender la Biblia.
Mejor dicho, no hay que satanizar ni hacer falsas interpretaciones. El 666 está en el libro de la Apocalipsis que fue escrito en la época de la persecución a los cristianos. Se habla allí de una manera simbólica y por eso a veces hay interpretaciones inadecuadas.
Lo mejor es pensar solo que se dice que el 666 es el número de la bestia porque se quiere mostrar al emperador que se devoraba a los cristianos. “No hay tal de identificar hoy a la bestia o al anticristo con personajes como Bill Gates y Putin o cosas como el código de barras, nada; el anticristo que veremos no llevará el número 666, el anticristo es el mal, como el narcotráfico, por ejemplo”, nos señaló el padre Zambrano.
Fórmula de la creación
Para terminar esta larga lista de los números de Dios, encontramos una vieja fórmula poco conocida que podría explicar la creación divina del universo, buscando demostrar cómo se puede lograr algo a partir de la nada. Claro, hay que tener en cuenta que hay dos teorías: la creacionista para los creyentes cristianos, y la evolucionista para los científicos.
El padre José Vicente Vaccaro, un estudioso salesiano, salió hace muchos años con esta teoría que explicaba en sus clases y escribía en sus libros: A sobre cero es igual a infinito, porque toda cantidad dividida por cero da infinito; y despejando, A sería igual a cero por infinito, con lo cual se puede obtener algo (el universo) de cero con tal que obre el infinito.
“Más pequeño es el divisor, más grande es el cociente. Si el divisor tiende a cero el cociente tiende a infinito”, les decía el padre Vaccaro a sus alumnos al hablar y escribir de la creación divina.
Pero para los matemáticos, los físicos y demás estudiosos de la ciencia que hacen publicaciones en Google y otros medios, esta fórmula no es válida, y señalan que cualquier número multiplicado por cero es cero, pero a su vez, cualquier número multiplicado por infinito es infinito. Entonces, se preguntan esos mismos científicos: ¿cuánto es cero por infinito? ¿es cero o es infinito? Y se responden: pues no es una cosa ni la otra, cero por infinito es otra indeterminación.
Bueno, no los enredamos más con tanto número, tantas fórmulas y tantas citas, ahí quedan estas cifras para las reflexiones que creyentes y ateos hagan durante esto días santos. Seguramente seguirá siendo muy difícil conciliar números, ciencia y creación. Dios nos ampare y nos ilumine.