Impuestos sin freno
¿La Reforma Tributaria sirve para arreglar el déficit de las finanzas públicas o para solucionar algún tema relacionado con la función del Estado? La respuesta categórica es no. Ninguna reforma va a alcanzar mientras se mantenga esta connivencia con la impunidad y la corrupción. Existe en Colombia en margen de impunidad de más de 90% en 2023, certificado por la Presidencia de la República a través de la Secretaría de Transparencia. Enquistados en el poder y cegados los políticos de siempre no tienen una real voluntad de lucha contra la corrupción, la cual se presenta en sus más diversas formas; el robo de los dineros del Estado, los escándalos permanentes de corrupción, la feria de delincuentes que se pasea por las calles impunemente ante la imposibilidad de la justicia para afrontar en debida forma la lucha que le corresponde, todo eso hace que los impuestos siempre sean insuficientes.
Pero no hay que equivocarse, la lucha contra la corrupción no es un tema de la administración de justicia, es un tema de decisión política, porque lo que falta es la verdadera voluntad del ejecutivo y del legislativo para apoyar nuestro sistema judicial; leyes tenemos y de las mejores y en todos los temas, funcionarios tenemos, jueces tenemos, administración de justicia a través de la rama judicial existe, pero faltan los recursos, el dinero, el material, la capacitación, el apoyo, la disposición presupuestal. Muy cómodos los demás actores echándole la culpa a quien debe hacer frente a la administración de justicia cuando le quitan las bases que son todas las que hemos mencionado. Ningún gobierno, realmente, ha afrontado las bases del problema y, ¿por qué? Porque no le da réditos políticos, porque no da votos. Han ido permitiendo que la sociedad se vaya degradando al punto que han olvidado que la justicia es algo esencial en la convivencia, algo fundamental, algo necesario para mantener el equilibrio entre los diferentes actores de la sociedad, pues la verdadera justicia no es el perdón y el olvido, la verdadera justicia es una reconciliación con sanción y/o con reconocimiento para las víctimas.
Siempre, sería una utopía negar lo contrario, habrá quien actúe bien y quien actúe mal, esto no es nuevo, esto no es exclusivo de nuestra sociedad, por eso siempre debe haber un sistema de justicia fortalecido que incluya castigos, reparaciones, en fin, que busque un equilibrio social. En todos los discursos se promete justicia, se promete paz, se promete igualdad, pero sin un sistema judicial fortalecido esto no será más que una Ideal frustrado y que nos lleva, como nos está llevando, a un caos sin igual.
Por donde lo miremos la víctima remota es el sistema judicial y las víctimas inmediatas próximas y latentes somos todos nosotros, acosados por la presión de la delincuencia, de más impuestos, de políticos que viven ajenos a una realidad del país
Es sencillo, un buen gobierno, un buen líder es el que aplica y vela por justicia dando cada cual lo que le corresponde. Las reformas tributarias nunca serán suficientes y tendrán el efecto negativo en nuestra sociedad, pues están ahogando el aparato productivo y la clase trabajadora.