Reforma Tributaria: luces en el camino
La próxima administración de Colombia tiene la intención de presentar una reforma tributaria que busca aumentar la recaudación fiscal en 5% del PIB, lo que nos invita a considerar el camino que se está recorriendo actualmente en Chile.
En línea con su campaña, el Gobierno del presidente Boric ya anunció los principales lineamientos de reformas tributarias que apuntan a financiar gasto fiscal mediante la recaudación de 4,1% del PIB por año en régimen.
La propuesta propone aumentar la recaudación a través de impuestos a la renta personal (incluyendo un impuesto al patrimonio), ajustes a los impuestos corporativos, nueva estructura de impuestos para la gran minería (regalías), medidas que reduzcan la evasión y elusión, además de reducción de exenciones, entre otros instrumentos.
Adicionalmente se espera el ingreso de un nuevo proyecto tributario de impuestos correctivos (impuestos verdes) durante el último trimestre de este año.
Así como ha ocurrido en el pasado con otras reformas tributarias, los proyectos seguramente tendrán modificaciones relevantes en el Congreso, y el trámite no será expedito, si consideramos que la coalición de gobierno no alcanza la mayoría necesaria para aprobar por sí sola el proyecto en ambas cámaras.
Para la institucionalidad fiscal es positivo que se mantenga el mantra de que “el gasto fiscal permanente debe ser financiado con ingresos permanentes”. Además, la economía chilena viene experimentando importantes ajustes tributarios en cada administración, por lo que podría ser beneficiosa una reforma que, eventualmente, genere mayor estabilidad.
Lo que no hay que perder de vista, es que se trata de la propuesta tributaria de mayor envergadura en la historia reciente de Chile, tanto en monto como en el corto horizonte en el cual se implementaría. Además, se presenta en un contexto en que la inversión privada se ha deteriorado más rápido de lo anticipado, mientras sus perspectivas anticipan un empeoramiento para el próximo año. Aumentar el costo del capital podría perjudicar estas perspectivas de inversión, y en el tiempo también el crecimiento de mediano plazo.
Cabe precisar que a 4,1% del PIB que se propone recaudar, se suman otras modificaciones tributarias aprobadas a inicios de año que eliminan y reducen exenciones tributarias, aumentando la recaudación en 0,9% del PIB por año en régimen. Así la economía chilena vería un aumento de 5% del PIB, llevando la carga tributaria por encima del nivel promedio de la Ocde ajustando por contribuciones a seguridad social y controlando por el nivel de ingreso per cápita de la economía.
Es importante que toda administración evalúe y calibre adecuadamente las reformas considerando el conjunto amplio de medidas que se propone. Esto es particularmente importante considerando que se proyectan discutir varias reformas tributarias en un período corto de tiempo, incluyendo en el ámbito tributario, pensiones, mercado laboral, y salud, entre otros.
Complementando el esfuerzo en recaudación, es fundamental que también se busquen fórmulas para mejorar la eficiencia del gasto público, redoblar los esfuerzos en transparencia del gasto público, y avanzar en el fortalecimiento de la institucionalidad fiscal en un sentido amplio.
Así, la discusión tributaria que ha empezado en Chile puede dar luces que ayuden a ver con más claridad el camino por el cual empieza a transitar Colombia en materia tributaria.