Tribuna Universitaria 16/10/2020

Mompox: distrito olvidado

Augusto Garrido
Docente de Ingeniería Civil

Parte del encanto de Santa Cruz de Mompox radica en la conservación de su singular fisionomía arquitectónica y de sus valores culturales. Siempre condicionado por el río, Mompox ha permanecido aislado y aunque, si bien esta segregación ha puesto algunos de los ingredientes para mantener inalterada la riqueza de su patrimonio, es hora de saldar la deuda que este olvido ha dejado.

Con la Ley 1875 de 2017 se decretó al municipio de Mompox como Distrito Especial, Turístico, Cultural e Histórico de Colombia, resaltando el amplísimo valor patrimonial que encierran sus calles, el cual ya ha sido reconocido por la Unesco al declararlo Patrimonio Histórico de la Humanidad en 1995.

Esta ley es un hito en la nueva historia de Mompox que se empieza a escribir junto con el documento Conpes actualmente está en preparación para impulsar los proyectos necesarios para dinamizar el desarrollo del nuevo distrito.

Más allá de las inmediatas soluciones que requiere el municipio en términos de conectividad, protección contra inundaciones y cobertura de acueducto y alcantarillado, es válido pensar que este es un gran momento para proponer un nuevo sistema de transporte público que satisfaga las necesidades de sus pobladores y que esté acorde con su vocación turística. Actualmente, el mototaxismo se presenta como la única oferta de movilidad al interior del distrito.

No obstante, lo pintoresco que a simple vista podrían lucir los mototaxis de vagón que circulan por el casco urbano, esta modalidad de transporte público es inadecuada desde varios puntos de vista: por una parte, ofrece bajas condiciones de seguridad y, por otra, no ofrece las condiciones de confort propias de un destino turístico por la contaminación visual y sonora que los acompaña.

El caos que generan, por la sobreoferta de vehículos, hace prácticamente imposible caminar con tranquilidad por las calles del municipio que además presentan una tipología particular por la elevación de los andenes.

La peatonalización de la calle de la Albarrada es un buen punto de partida para una solución de movilidad más adecuada para Mompox, pero no es suficiente, se requieren otro tipo de medidas que incluyen la mejora de las vías y la implementación de un adecuado sistema de drenaje pluvial para mejorar la experiencia del peatón que quiere apreciar con detenimiento la belleza del patrimonio arquitectónico.

Pero no se trata de pensar solo en los turistas, los momposinos también merecen tener un adecuado sistema de transporte urbano. Se deben priorizar los planes que promuevan la movilidad activa, implementando un sistema de bicicletas públicas.

Adicionalmente, se podría implementar un sistema de autobuses de bajas emisiones con una ruta circular entre la Calle del Medio y la Carrera 3. Y si se trata de soñar, también cabría pensar en un sistema de transporte público fluvial para que el río cobre protagonismo en esta nueva etapa de la historia de Mompox.

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