‘Fichajes’ extraordinarios de Meta en la era de la IA
viernes, 1 de agosto de 2025
Camilo Salah
Hace pocas semanas, Mark Zuckerberg anunció la creación de Meta Superintelligence Labs, MSL, una nueva división dentro de Meta cuyo objetivo es ambicioso: desarrollar sistemas de inteligencia artificial más avanzados que la inteligencia humana. Para liderar esta apuesta, Zuckerberg designó a Alexandr Wang, el joven fundador de Scale AI, empresa clave en el entrenamiento de modelos de IA para clientes como PayPal, Alphabet, Samsung, e incluso el Departamento de Defensa de EE.UU., con quien ha sostenido contratos para el Pentágono.
Meta ya había invertido US$14.300 millones para obtener 49% de Scale AI, lo que no solo le otorgó acceso a su capacidad tecnológica, sino también al liderazgo de Wang, a quien Zuckerberg calificó como “el fundador más impresionante de su generación”. Con solo 28 años, Wang ahora lidera la visión de superinteligencia de Meta, y su fichaje marca el inicio de una ofensiva sin precedentes por parte de la empresa para reclutar a los mejores talentos del sector.
En paralelo a la incorporación de Wang, la compañía con sede en Menlo Park, California, fichó a docenas de ingenieros, científicos de datos e investigadores, muchos de ellos provenientes de compañías rivales como OpenAI, Anthropic, Apple y Google DeepMind. Las cifras de compensación que se manejan han causado revuelo: de acuerdo con el portal de noticias The Information, algunos de estos profesionales estarían recibiendo paquetes de hasta US$100 millones o más entre salario, equity y bonos a largo plazo. Una dinámica que recuerda más a las ligas europeas de fútbol o la NBA que al mercado corporativo tradicional.
Uno de los casos más destacados fue el de Ruoiming Pang, hasta entonces líder de un equipo de más de 100 ingenieros en Apple. Su llegada se concretó con un paquete multimillonario, en una señal clara del tipo de guerra por el talento que se está presenciando. También se conoció que la compañía contrató al menos a cinco investigadores clave de Apple y de OpenAI, incluido uno de los cofundadores de ChatGPT. Adicional a esto, en los últimos días, Wired reportó que Meta se aproximó a varias personas de TML, o Thinking Machine Labs, el startup de tecnología fundado por la ex-CTO de OpenAi, Mira Murati, con paquetes ampliamente superiores a los mencionados previamente.
Esta oleada de fichajes se enmarca en una carrera global por el liderazgo en llegar a la super inteligencia artificial, donde los tiempos se acortan y la presión por innovar crece. El gobierno de EE.UU., por su parte, anunció la semana pasada un plan federal con 90 medidas para acelerar el desarrollo de la IA nacional, reduciendo regulaciones y creando incentivos para compañías líderes como Meta, Google, Oracle, Microsoft o Amazon. El objetivo es explícito: recuperar el liderazgo tecnológico global y contener el avance de potencias como China en este frente. En este nuevo contexto, las empresas tecnológicas no solo compiten por algoritmos o poder computacional, sino por capital humano del más alto nivel.
Lo que antes era un fichaje multimillonario de un delantero estrella en el Real Madrid, hoy se traduce en el reclutamiento de un científico especializado en machine learning. La inteligencia artificial se ha convertido en el nuevo terreno de juego para los grandes fichajes, y Meta está apostando fuerte para ganar esta competencia. La pregunta es si estamos presenciando el inicio de una nueva era, o simplemente inflando una burbuja, más alimentada por hype que por ciencia.