Volver a la oficina
La pregunta que se formulan las empresas es si el trabajo en casa que trajo la pandemia está para quedarse o si lentamente y a medida que avanza la vacunación se irán repoblando los escritorios de los edificios de oficinas. De este interrogante salen varias inquietudes. En primera instancia, hay que saber si las personas que trabajan en casa quieren volver a sus escritorios; segundo, las empresas tendrán que evaluar si la productividad de los trabajadores es similar o superior cuando trabajan en casa y finalmente es necesario conocer en función de los puntos anteriores cual será el futuro del mercado de oficinas.
El aspecto relativo a si los trabajadores quieren volver está tratado con sumo cuidado en un artículo de The Economist (20 de febrero). Según esta publicación un estudio del Harvard Business Review realizado en 46 países arrojó como resultado que 85% de los trabajadores consideraron que con el trabajo en oficina su bienestar se había visto afectado y un 55% consideró que no habían logrado un buen balance entre su trabajo y su hogar. A esto se suma que con el trabajo en casa se están transfiriendo a los empleados los costos de electricidad, internet, línea telefónica y otros menores y que los lugares de trabajo no son los más adecuados. Otra queja frecuente entre los trabajadores es que con el trabajo en casa se han alargado las jornadas laborales, porque no hay horarios fijos. Estas cifras y consideraciones son indicativas de que una gran mayoría quiere regresar a la oficina.
¿Cuál es la productividad del trabajo en casa? Según la plataforma Life Beyond Work, aquellas empresas que no tienen una clara estrategia de Home Office, han visto impactos negativos de hasta un 50% en los niveles de productividad de los colaboradores. Ahora bien, dado que la decisión de permitir que la gente trabaje desde la casa no fue producto de una estrategia, sino producto de un fenómeno repentino y que ha existido una incertidumbre acerca del regreso a la normalidad, no es dable pensar que las empresas tengan un clara estrategia del trabajo en casa.
Otros trabajos de Gallup muestran mejores rendimientos de los trabajadores cuando hay trabajo en casa uno o dos días a la semana, que era algo que ya venía sucediendo en muchas empresas. Hay que tener en cuenta que el trabajo en casa producto de la pandemia ha estado acompañado por cierres escolares lo que obliga a los padres a distribuir su tiempo entre sus obligaciones laborales y aquellas de educadores ocasionales lo que a su vez impacta la productividad.
Suponiendo que la formula post covid sea una de dos día en la semana en casa y tres en la oficina, cabe preguntarse qué pasará con el mercado de oficinas. En principio se pensaría que las empresas necesitarán menos espacio, pero dado que esa nueva realidad demanda más distanciamiento entre lugares trabajo podría pensarse que el mayor espacio requerido por trabajador compensará los espacios libres del trabajo en casa. De lo que si no hay duda es que el concepto de oficina como lo conocemos hoy va a desaparecer y serán más comunes estaciones trabajo comunitarias donde la identidad del trabajador estará en la nube y la accede al conectar su computador.
Lo cierto es que en Bogotá el nivel de vacancia de los edificios de oficinas estuvo a finales de 2020 en 13%, y tanto en Colombia como en otros países de la región, se observan nuevos proyectos. La oficina habrá que repensarla, pero no ha muerto.