Con la temporada de vacaciones, llega una oportunidad de hacer una pausa en el camino y descansar de los compromisos laborales. Desconectarse del ajetreo es una buena opción después de un largo año de trabajo, que pudo estar cargado de grandes desafíos económicos, nuevos retos laborales, logros alcanzados con el equipo, entre otros.

Para tomar este descanso, pero en paralelo hacer una reflexión sobre nuestro liderazgo, quisiera invitarlos a ver la serie Ted Lasso en Apple TV+. En este programa, un entrenador de fútbol americano acepta una oferta laboral para liderar un equipo de fútbol en Inglaterra: el AFC Richmond. A pesar de estar en la Premier League, el equipo enfrenta grandes desafíos en su gestión, empezando porque el nuevo entrenador ni siquiera sabe qué es un fuera de lugar.

La serie es divertida y emotiva, y sus personajes son entrañables. Si no son expertos o fanáticos del fútbol, no importa, porque en cada capítulo tendrán más aprendizajes sobre la vida que sobre este deporte. Comparto con ustedes algunas de las enseñanzas que deja Ted Lasso sobre el liderazgo en esta serie, para invitarlos a verla sin hacer un spoiler:

1. El líder no siempre es experto en el tema: el protagonista no tiene experiencia en fútbol, sin embargo, sí sabe cómo dirigir equipos y entrenarlos para ser los mejores. En diferentes capítulos se ejemplifica cómo el líder, a pesar de no tener todo el conocimiento, puede rodearse de un equipo de trabajo que sí tenga experiencia. Se reafirma la promoción del liderazgo compartido para llegar al objetivo común y la capacidad de adaptabilidad. En menos de dos temporadas Ted ya sabe reconocer las reglas del fútbol.

2. Generar confianza y creer: dada la falta de experiencia en el deporte, el equipo de fútbol no confía en su entrenador. Lasso usa diferentes tácticas para ganarse la confianza de sus jugadores e incluso de la hinchada. Verán en la serie que esto no se logra de un día para otro, pero sí es posible con dedicación, paciencia, escucha activa y apoyo incondicional. Si algo sienten sus jugadores durante todas las temporadas es que su entrenador estuvo para ellos en cada paso y que, si bien no eran los mejores, ellos se aferraban a un concepto: “believe” (creer).

3. Ser vulnerable: Ted enfrenta diferentes desafíos personales y profesionales que lo llevan a situaciones de vulnerabilidad con su jefe y su equipo. Aunque es un hombre optimista, el director técnico siente miedo, preocupación y a veces se le ve molesto por diferentes factores. Entiende que es un líder y, principalmente, un ser humano, como el resto de su equipo.

4. Humor: esta es unas de las habilidades de los líderes que genera mayor recordación en el equipo de trabajo. El humor permite que la gente escuche, aumenta la retención a largo plazo y ayuda a comunicar mensajes. ¡Las risas no faltarán en esta serie!

5. Empoderar al equipo: está bien preguntarle al equipo qué quiere hacer para llegar al objetivo final. No siempre se debe esperar a que el líder diga hacia dónde deben ir. Ted suele escuchar a los miembros club, y con esto no me refiero solo a sus jugadores, sino también desde el aguatero hasta la relacionista pública. Ser líder también es sacar lo mejor de cada persona para que brille desde su conocimiento.

6. Ganar no lo es todo: aunque se tiene un objetivo final claro, Ted Lasso recalca la importancia de aprender en el camino, de crecer como equipo y no necesariamente ganar cueste lo que cueste. A pesar de que él y su equipo cometen errores, él recuerda que en esos momentos se debe ser un pez de colores. “El animal más feliz del mundo”: tener una memoria de 10 segundos para entender qué pasó y luego continuar con el camino sin estancarse en lo que pudo ser.

7. Comunicación y honestidad: Ted es sobre todo un hombre honesto con sus palabras y sus emociones. No endulza las derrotas y tiene claro que las dificultades pueden estar a la vuelta de la esquina: “Asumir un reto es muy parecido a montar a caballo, ¿no? Si te sientes cómodo mientras lo haces, probablemente lo estás haciendo mal”. Ted, como buen líder, las ve siempre como oportunidades.

Como he mencionado en diferentes columnas, un líder es una persona que promueve el cambio, que inspira para lograr los objetivos de la organización, mientras en paralelo desarrolla a su equipo de trabajo para que tengan mayores competencias y habilidades. Ted Lasso es un ejemplo de todo ello. Por eso, este es mi regalo para ustedes en estas vacaciones.

¡Feliz Navidad!