Resoluciones de año nuevo
Por donde se mire, 2022 ha sido un año retador, en el que sentimos los efectos de fenómenos globales, regionales y locales, que nos demostraron que, en efecto, ninguna persona u organización es una isla.
El sector tecnológico vivió un marcado, y en ocasiones difícil, reacomodamiento tras el impacto de la pandemia y en el proceso vio acentuarse algunas amenazas, pero también perfilarse nuevas oportunidades. En Dell creemos que el año que se avecina recompensará a las empresas que lleguen preparadas, con plena conciencia del momento que viven el sector tecnológico y el aparato productivo en general. A medida que avanza la transformación de la fuerza de trabajo, las personas demandan herramientas para ser productivas desde cualquier lugar o entorno y eso crea nuevas necesidades en materia de acceso y seguridad.
Las organizaciones seguirán utilizando las múltiples alternativas que les ofrece la nube para el manejo de sus cargas de trabajo, de los datos y la información como fuente de generación de valor para sus negocios y comenzarán a entender el inminente impacto de tecnologías como la computación cuántica.
Como encargados de dictar las políticas y las acciones del área informática de una organización, los CIO deben tener estrategias que reconozcan este momento. En este sentido, hay algunos factores que se deben tener en cuenta para el 2023.
Primero, es indispensable no usar infraestructura de nube sin entender su costo a largo plazo. No es suficiente elegir un entorno de nube que funcione, es necesario entender al detalle el costo a corto, mediano y largo plazo. Eso significa usar las herramientas disponibles no solo de una manera tecnológicamente sofisticada, sino económicamente sofisticada también.
También es necesario contar con un plan de manejo y control transversal a todas las estructuras de nube en uso en la organización. Las políticas fragmentadas y los flujos dispersos de información debilitan la operación y aumentan las vulnerabilidades. Es indispensable definir el plan zero trust para la multinube. Desde el punto de vista de la seguridad, eso significa definir los comportamientos adecuados en lugar de solo buscar prevenir los comportamientos prohibidos.
Igualmente, es fundamental dotar de un solo marco funcional a todos los recursos de manejo de amenazas. Esta clase de integración hoy es posible y hace que las personas encargadas, y la organización como tal, puedan responder de manera más expedita en caso de ataque. La fórmula es identificar fortalezas y vulnerabilidades, proteger los servicios de infraestructura crítica y detectar todo evento de ciberseguridad.
Por otra parte, se debe conocer con claridad la protección de las operaciones Edge. Maximizar el potencial comienza con la simplificación de las operaciones. Innovar libremente en las operaciones Edge implica entender sus desafíos.
Finalmente, es relevante definir los puntos de la organización que se protegerán primero con criptografía post-cuántica.