Del ambientalismo antisistema al regenerativo

Muy importante para la humanidad un espacio de reflexión y construcción de propósitos comunes como la Cumbre de la biodiversidad. La transformación del planeta con el avance de la especie humana es radical y ya irreversible. Cito tres trabajos ampliamente conocidos. Uno, el clásico de Jared Diamond, “Armas, gérmenes y acero” y el segundo, más reciente, de Oded Galor, “El viaje de la humanidad”.

En ambos trabajos los investigadores muestran cómo la expansión de la especie y su migración acompañó la extinción masiva de los grandes mamíferos, primero en África, luego en Eurasia, luego en Australia, Siberia y América. Muestran cómo las prácticas culturales depredatorias llevaron al colapso lugares como la Isla de Pascua o lo que fue la “Media luna fértil” y hoy es una zona desértica, y el famoso cedro del Líbano, la base de la civilización y la capacidad naval fenicia ahora es una curiosidad que visitan los turistas.

El tercero, David Landes en “La riqueza y la pobreza de las naciones” sostiene que los saltos en el desarrollo han estado acompañados por una transformación en el uso de la energía, arrancando con el uso del fuego que permitió trasformar la dieta y la capacidad de sobrevivir al frío. Pero este condujo a la depredación de bosques en todo Eurasia. Irónicamente fue el carbón el que salvó los bosques, y el petróleo el que nos liberó del carbón como ahora lo hace el gas. La transición a combustibles limpios es sin duda la tarea pendiente.

Cuando éramos pocos el planeta tenía capacidad de regeneración, hoy el mundo agota la capacidad de regeneración del planeta en julio 30 de cada año. Colombia agota su capacidad de regeneración en octubre 5. (https://overshoot.footprintnetwork.org/)

Requerimos de una ética distinta como especie. Es desde las instituciones sociales y las dinámicas económicas que generamos los recursos requeridos para la regeneración endógenamente a las actividades. Es desde estas mismas actividades desde las cuales se deben construir las instituciones inclusivas que superen el extractivismo. La COP16 no será recordada por lograr avanzar en este sentido, habiendo terminado sin cierre de acuerdos.

La ministra se ufana que esta fue la Cumbre de la gente y que se tuvieron 39 documentos de los grupos étnicos. Que se declaró que los indígenas y negritudes son los guardianes de la biodiversidad. Cómo conciliar la posición alcahueta de este gobierno y estas comunidades con la destrucción del Chocó con la minería ilegal en Río Quito y en Cauca con el oro y la coca.

Ante lo borroso del balance en una entrevista, Yamid Amat, le repetía la pregunta ante las evasivas de la ministra Muhamad: “Le insisto: ¿cómo cuidar la Tierra?”, finalmente dijo: “La forma de proteger la Tierra va de la mano de cambiar nuestros modelos de consumo a través de acciones que nos permitan adoptar una economía descarbonizada basada en potenciar una nueva economía que, en vez de destruir la naturaleza, la regenere.”

Esto es, pasar del ambientalismo antisistema al regenerativo. Gran daño está haciendo al medio ambiente la ideologización del problema. A los antisistema se oponen los negacionistas, que cada vez ganan más elecciones.