¿Aprovechamiento de la infraestructura de… cuáles DATOS?
martes, 28 de mayo de 2024
Eva Barreneche López
Recientemente, el Gobierno Nacional presentó un proyecto de ley que establece disposiciones para el suministro, intercambio y aprovechamiento de la infraestructura de datos del Estado Colombiano. Esta propuesta, que promete revolucionar el uso de datos en Colombia, incluye medidas diseñadas para mejorar la eficiencia y la interoperabilidad de los sistemas de información de las entidades públicas.
El proyecto de ley enfrenta múltiples desafíos, siendo uno de los principales, la promoción de la interoperabilidad en los sistemas de información en entidades públicas. Si bien esta medida podría facilitar un intercambio de datos más eficiente entre las instituciones, se topa con obstáculos considerables y problemas arraigados desde hace tiempo.
A pesar de que la idea de interoperabilidad no es nueva -el MinTIC inició la implementación del Marco de Interoperabilidad para Gobierno Digital en 2019-, los resultados obtenidos hasta la fecha han sido poco alentadores, revelando una implementación insuficiente incluso cinco años más tarde.
El proyecto impulsa la adopción de tecnologías avanzadas como la analítica y la inteligencia artificial en la toma de decisiones. Sin embargo, es crucial preguntarse: ¿cómo se implementarán estas tecnologías en entidades que aún desconocen conceptos básicos como el ‘ Lenguaje Común de Intercambio de la Información’?
Asimismo, la falta de presupuesto para roles esenciales como arquitectos de interoperabilidad, líderes funcionales, expertos en calidad; infraestructura y seguridad de la información complica aún más la situación, especialmente en entidades que desconocen la existencia de un modelo de madurez en el marco de interoperabilidad.
Este proyecto es, sin duda, una loable iniciativa que promueve el tema de moda, la IA
El proyecto también propone un modelo de gestión de datos maestros con el noble objetivo de garantizar la gobernabilidad y estandarización de los datos para asegurar su fiabilidad. Sin embargo, resulta complejo asegurar el cumplimiento de este objetivo cuando ya existe una guía de estándares de calidad e interoperabilidad de los datos abiertos que, tras cinco años de implementación, muestra una adopción limitada de los 16 principios básicos de calidad de datos. Parece que aspirar a lo básico sigue siendo un desafío monumental.
Por ejemplo, los artículos 15 y 16 del Proyecto de Ley abordan la anonimización y seudoanonimización de datos, aunque estos conceptos no son novedosos -ya se incluyeron en la guía de confidencialidad basada en la Ley de Transparencia y Derecho de Acceso a la Información-, el proyecto no detalla claramente los mecanismos que asegurarán la no reidentificación de datos personales.
En ese mismo sentido, el artículo 27 subraya la importancia de establecer medidas de seguridad digital robustas, que incluyan normas, políticas y procedimientos específicos. Hasta la fecha, estas medidas parecen estar a la deriva, con dos proyectos de ley que buscan regular la entidad rectora de seguridad digital en el país, los cuales, al parecer, no estarán listos para esta vigencia.
Además, existe un conjunto de decretos y resoluciones del sector público y del financiero que no parecen estar coordinados, y una deuda pendiente de un marco normativo para la identificación de la infraestructura crítica, en la cual se ha trabajado durante más de un año sin resultados tangibles. Las entidades aún no han podido implementar el modelo de seguridad y privacidad de la información. ¿Entonces?
Es un gran documento normativo, eso sí, pero cuando llegue a manos de los secretarios TIC o a las oficinas de TI que todavía luchan contra enormes desafíos de conectividad, gestión y seguridad de la información y de transformación digital básica, es probable que su respuesta sea un rotundo: ¿De qué me hablas, viejo? Esto evidencia una desconexión palpable entre las expectativas legislativas y la realidad operativa. No es de extrañar que surjan discrepancias.
Este proyecto es, sin duda, una loable iniciativa que promueve el tema de moda, la inteligencia artificial; sin embargo, dista mucho de ser una solución verdaderamente innovadora o que esté diseñada para tener un impacto significativo en el programa de intercambio y aprovechamiento de la infraestructura de datos del Estado Colombiano.