La celebración del Día Mundial del Turismo este 27 de septiembre nos invita a reflexionar sobre el futuro de esta industria y sobre cómo Colombia debe asumir y liderar las transformaciones del sector de cara a una nueva realidad.
Como país le apostamos a un turismo sostenible que proteja el medio ambiente, las comunidades y el patrimonio cultural, entre otros activos. En nuestra labor de promocionar esta industria a nivel internacional, buscamos atraer a un turista de alto nivel cuyos valores fomenten el desarrollo y la conservación de nuestros destinos.
“Turismo y desarrollo rural” es el lema seleccionado este año para celebrar esta importante fecha, un tema apropiado pues como resultado de la coyuntura, vemos cómo cada vez más para el turista es indispensable escoger un destino comprometido con proteger los ecosistemas, los recursos naturales, los bienes y las tradiciones culturales, así como generar el desarrollo social y económico de las comunidades.
Colombia desde hace un tiempo viene encaminando su política de turismo hacia la sostenibilidad, lo que se convierte ahora en un requisito indispensable para consolidar al sector. Es así como el Gobierno Nacional adelanta dos acciones claves, primero radicar ante el Congreso de la República la modificación de la Ley General de Turismo para sentar sus bases en la sostenibilidad y, segundo, desarrollar la Política de Turismo Sostenible.
Esta última responde a la necesidad de crear mecanismos de conservación, protección y aprovechamiento de los atractivos turísticos, además de fortalecer la formalización, la competitividad del sector y los actores de la cadena de valor en seis etapas: información, gobernanza, inversión e innovación, oferta, demanda responsable y posicionamiento.
Queremos ser un país vanguardista en la búsqueda de implementar prácticas turísticas responsables y por eso estamos liderando iniciativas en escenarios internacionales como ser miembros fundadores de la Coalición para el Futuro del Turismo (The Future of Tourism Coalition), creada por organizaciones internacionales como Green Destinations, Tourism Cares y The Travel Foundation.
Además, hacemos parte del Sustainability Council de Virtuoso, red internacional líder de agencias de viajes especializadas en el segmento de lujo. Somos uno de los pocos países de la región en este consejo en donde intercambiamos experiencias, conocimientos y buenas prácticas en sostenibilidad.
Nuestro compromiso también está en productos como sol y playa. El año pasado las playas de Jhonny Cay en San Andrés, Azul en La Boquilla (Cartagena), Bello Horizonte en Santa Marta y Magüipi en Buenaventura, obtuvieron la certificación internacional Blue Flag, lo que indica que cumplen con una serie de estrictos criterios ambientales, de seguridad y de accesibilidad, el cual es entregado por la Fundación de Educación Ambiental (FEE, por sus siglas en inglés).
Queremos motivar a más playas para que se certifiquen, por eso elaboramos un brochure que explica de manera fácil y con detalle cómo obtener este sello de alta calidad sostenible que pronto se encontrará en la página de Colombia.travel. Este trabajo lo hacemos junto con Acodal, la Asociación Colombiana de Ingeniería Sanitaria y Ambiental, ente certificador del sello Blue Flag en Colombia.
Además, firmamos convenios con organizaciones como la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID) con su programa “Riqueza Natural” para promover la conservación de la biodiversidad en el país y también con Parques Nacionales Naturales de Colombia con fines de conservación del patrimonio natural y cultural del país.
Todas estas iniciativas y proyectos también las ponemos al servicio y conocimiento de nuestros empresarios a través del Programa de Formación Exportadora en Turismo, en el que ya tenemos más de 18.500 asistentes. Con este proyecto los preparamos y capacitamos para que asuman estas responsabilidades que garanticen su oferta turística en el futuro.
Para el plan de reactivación de la industria, planteamos cuatro ejes fundamentales de acciones entre las que se encuentra focalizar la estrategia en promocionar un turismo sostenible y de alta calidad, además de facilitar el retorno de la conectividad aérea; brindar herramientas a los empresarios para prepararse ante las nuevas tendencias; y promover alianzas interinstitucionales e intrarregionales en Colombia y en Latinoamérica.
Es así como de cara al futuro tenemos una labor grandiosa de convertirnos en un ejemplo mundial. Me gusta citar a Costas Christ, experto en turismo sostenible a nivel internacional, quien dijo: “Colombia no es un seguidor, es un líder”, al referirse a que muy pocos países tienen una política de sostenibilidad en turismo, y esto, sumado a nuestro potencial como país megadiverso, con una gran herencia cultural y la calidez de nuestra gente, nos convierten en un destino competitivo y a la cabeza en la tarea de fomentar un turismo responsable a nivel global.
Queremos un turismo de calidad, que genere ingresos, que se lleve a cabo de manera adecuada, y que sea amigable para los destinos y las comunidades. Queremos un turismo para los próximos 100 años.