Educación superior en Colombia
Cuando uno se pregunta cuál es el modelo de educación superior que el país necesita y qué el mundo está demandando, no puede hacer caso omiso a la pandemia que acabamos de vivir como humanidad. Sin ninguna duda, la educación superior a nivel global está sufriendo los efectos colaterales que deja la crisis del covid-19. Para superar esas crisis es necesario que seamos creativos e imaginativos, pensando en cómo motivar a la juventud de hoy, que vean en la Educación superior una forma de mejorar y transformar su calidad de vida y la de su familia, en el mediano y largo plazo. El gran reto se encuentra en demostrar que la educación superior, abre más posibilidades de crecimiento y desarrollo más sostenibles, que las opciones que en el corto plazo pudieran dejar algunas actividades económicas de moda o pasajeras.
Por lo anterior, hemos tomado la decisión de participar en el proceso de elección de Rector de la Universidad Nacional de Colombia, en el periodo 2024 a 2027 y presentar una propuesta para gerenciarla con transparencia y eficiencia. Dicha propuesta se fundamenta en una universidad del conocimiento, la sostenibilidad y la paz en los territorios de Colombia.
Los siguientes cuatro principios fundamentan esta propuesta: El primero, el derecho a la educación, un derecho humano fundamental que garantiza una vida digna en una sociedad equitativa, justa e igualitaria. El segundo, la ciencia, la tecnología, las artes y las humanidades representan los pilares fundamentales para lograr una sociedad en paz. El tercero, la investigación es la base en los procesos de formación académica y de la extensión universitaria. Y finalmente, el cuarto, la descentralización, la organización institucional y la gobernanza de las Sedes que conforman la Universidad.
Las nuevas realidades que vivimos nos presentan retos, desafíos y muchas oportunidades de ser parte del cambio que la sociedad colombiana espera de nosotros como Universidad Pública. La educación telepresencial, la educación híbrida, la educación online (erróneamente educación virtual), es la apuesta que queremos desarrollar durante este periodo al frente de la rectoría de la Universidad Nacional de Colombia. 42.000 nuevos cupos en este modelo educativo, harán posible que lleguemos a una cobertura de cien mil estudiantes al finalizar este periodo. La gestión de más recursos financieros frescos (con un programa fuerte con egresados) y esa corresponsabilidad del sector productivo por cualificar el capital humano que ellos demandan, hace que esta propuesta tenga una probabilidad alta de ser implementada.
Escribo esta columna desde una de las nueve sedes de la Universidad Nacional de Colombia, la sede de La Paz (anteriormente sede de Frontera y en la actualidad sede Andina), Área Metropolitana del Cacique de Upar (Departamento del Cesar), zona geográfica de Colombia que será uno de los polos de desarrollo en los próximos 50 años, su probabilidad alta de recursos polimetálicos, la riqueza de carbón térmico, las oportunidades de fuentes sostenibles de energía (solar y eólica), el desarrollo histórico ganadero y agrícola, y la riqueza de su folclore.