La Agencia Nacional de Minerìa-ANM, acaba de publicar la Resolución 1006 del 30/11/2023 con la definición de 17 minerales estratégicos, definición que no se realizaba o actualizaba desde hace más de 11 años en el país. Con profunda extrañeza se ve como en esta Resolución, la ANM y el Servicio Geológico Colombiano-SGC, han dejado por fuera de esta definición minerales y grupos de minerales tan importantes para garantizar unatransición energética y procesos de reindustrialización como la Plata, el Litio, el Cobalto, las Tierras Raras, el Uranio y el Carbón Térmico.

Vamos por partes.

En primer lugar, si seguimos pensando en Transición Energética, con la visión de importar paneles solares, molinos de viento, autos eléctricos (incluidas las baterías de litio y los motores), apague y vámonos. Si continuamos con el desprecio por el carbón térmico, pero en caso de tener un fenómeno del niño muy fuerte en el mediano plazo y tengamos que acudir a garantizar la estabilidad del sector eléctrico, suministrando energía por medio de las termoeléctricas, apague y vámonos.

Seguidamente, con el objetivo de hacer pedagogía minera, para la fabricación de los paneles solares son necesarios como minerales principales la plata, el aluminio, el hierro, el silicio y el titanio, entre otros. Dejar de lado la Plata en la Resolución del caso, no solo es una muestra de la poca claridad que se tiene frente a la definición de minerales estratégicos, sino que es desconocer los importantes prospectos geológicos que se encuentran en Tolima y que pueden llegar a convertirnos en un importante proveedor de esta materia prima tan estratégica o como la reza el slogan del Gobierno Nacional, Colombia Potencia Mundial de la Plata.

Ahora bien, es urgente una definición más amplia y diferenciadora de los minerales estratégicos y los minerales críticos que necesitamos como país y que la sociedad global demanda, pensando en procesos de desarrollo minero-industrial a 2040 y con el objetivo de aprovechar al máximo la riqueza geológico-minera que tenemos en el subsuelo.

La coherencia institucional y gubernamental (con el apoyo de las empresas mineras que extraen recursos minerales en Colombia) debe primar sobre todas las cosas. Coherencia que se presenta una asimetría en esta Resolución y el Borrador del documento Conpes: Política Nacional de Reindustrialización. Lo anterior, para garantizar los lineamientos de la Institucionalidad minera como lo son: Existencia de ambientes geológicos favorables y priorización de la investigación. Demanda de minerales para la transición energética. Demanda de minerales para la seguridad alimentaria. Demanda de minerales para el desarrollo industrial y de la infraestructura pública. Minerales para el autoabastecimiento. Minerales para promover la asociatividad.

Para terminar dejo las siguientes preguntas: ¿Qué transición Energética queremos?; ¿Qué procesos de reindustrialización queremos desarrollar en Colombia para aprovechar la riqueza del subsuelo?; ¿Qué Transición Energética podemos cumplir y garantizar a las generaciones futuras? y ¿Qué Transición Energética deberíamos tener dadas las condiciones y características que tenemos como país?.