En el sector salud, la seguridad, la precisión y mejorar la experiencia de las personas son premisas imperativas. En ese sentido, hoy es válido afirmar que la vida del paciente no solo depende de un doctor o una enfermera, sino de todo un sistema que se articule a la perfección para ofrecer bienestar. La cadena de suministros ahora juega un rol mucho más importante en esta área, dado que, un buen engranaje mejora costos administrativos, minimiza el riesgo en la asistencia médica y garantiza una óptima atención sanitaria.
Tan solo en 2019, la Organización Mundial de la Salud informó que cuatro de cada diez pacientes de los servicios de atención primaria y ambulatoria sufrieron algún perjuicio como consecuencia del diagnóstico y la prescripción de uso de medicamentos, pero el 80% de esos casos se podía prevenir. La misma entidad aseguró que, en todo el mundo, el costo asociado a los errores de medicación asciende a US$42.000 millones anuales, por lo que cada vez más el sistema le ha puesto la lupa a esta situación y está tomando cartas en el asunto.
Es así como la tecnología se ha convertido en una gran aliada del sector para reducir el riesgo de los pacientes y mejorar la logística. Se puede destacar, por ejemplo, la incursión en la impresión a color. Desde la historia clínica de los pacientes hasta el etiquetado de los medicamentos puede hacer la diferencia entre la vida y la muerte.
Existen estudios que comprueban que el color le facilita a los médicos y administradores captar rápidamente la información clave de un paciente y garantizar que se incluyan todos los datos relevantes de su tratamiento. También hace que los informes de los pacientes sean más claros y fáciles de leer.
Pensando en esto, en Epson hemos hecho grandes esfuerzos para anticiparnos a las necesidades de los diferentes sectores y uno de ellos es de la salud. Entendemos mejor que nadie la importancia de un etiquetado óptimo que permita mejorar las prácticas hacia el cuidado de los pacientes. Es por esto, que trabajamos en crear equipos que aporten bienestar a la sociedad, como es el caso de la línea de impresoras de etiquetas a color ColorWorks, diseñadas para brindar a la industria la posibilidad de agregar una imagen a todo color a una píldora o cápsula, además de una foto del perfil del paciente en las cajas y botellas de los medicamentos; así como lograr la integración de etiquetas codificadas por colores que garantizan que el medicamento adecuado coincida con el de la etiqueta, proporcionando seguridad adicional al paciente.
Además de esto, hay otras ventajas que trae para la industria el etiquetado a color. Usualmente, la tecnología de impresión láser requiere un fusor de alta temperatura, mientras que la tecnología de inyección de tinta no requiere tiempo de calentamiento. Eso significa que con la tecnología de inyección de tinta se puede imprimir de manera eficiente y ayuda a mejorar la productividad. Igualmente, genera un mejor rendimiento, facilidad y agilidad para las personas que la utilizan.