$5 billones listos para créditos
Un plan de reactivación económica no se implementa para regresar al pasado. Lo que realmente encarna, es una oportunidad para mejorar, innovar y adaptarse a las nuevas realidades. Y eso es precisamente lo que estamos haciendo en el Banco Agrario de Colombia. Aquí nos sumamos a la iniciativa del Gobierno Nacional para “jalonar” el desarrollo integral del país, poniendo a disposición $5 billones que representan recursos frescos para apalancar proyectos productivos en el campo y en la ciudad.
Con decisiones de este talante, el Banco Agrario va un paso más allá de la inclusión financiera. Al poner esta nueva bolsa de recursos en el mercado, permitimos que más colombianas y colombianos tengan la oportunidad de acceder a un crédito. En palabras sencillas, a más plata, más beneficiarios.
La reactivación después de una crisis no puede significar regresar a los niveles previos; En nuestro caso, ha sido una oportunidad para transformarnos en muchos sentidos: en los últimos dos años hemos incorporado tecnologías más eficaces, aumentado capacidades, trabajamos en un crecimiento más inclusivo y disponemos de nuevas herramientas para que nuestro banco sea el verdadero aliado de la economía popular, la agroindustria y la asociatividad.
Disponer de estos nuevos recursos no constituye una decisión tomada a la ligera. Por el contrario, es el resultado de un trabajo consiente y minucioso. El mismo que nos ha permitido crecer y consolidar al Banco Agrario como una entidad sólida y eficiente, que mitiga y administra los riesgos a los cuáles se ha enfrentado, y que hoy por hoy cuenta con una cartera alcanza los $21,3 billones -frente a los $16 billones que registraba en agosto de 2022- y desembolsos por más de $22 billones en los dos últimos años.
Somos un banco a la vanguardia, con metas ambiciosas y, sobre todo, con absoluta responsabilidad en el manejo de nuestros recursos. Varias calificadoras internacionales han dado su aval a nuestra gestión. Eso nos permite seguir creciendo de manera responsable y a su vez, permitiendo que nuestros clientes puedan contar con mejores servicios y oportunidades de crédito.
Hemos entendido este proceso de reactivación como una oportunidad para la reinvención y la apertura de nuevos caminos y aprendizajes. Por eso, no solo pensamos en los recursos, sino también en seguir potencializando medidas como la eliminación de requisitos a la hora de solicitar un crédito - por ejemplo, la demostración de tenencia sana de la tierra sin necesidad de hipotecar el predio-; el acompañamiento con herramientas tecnológicas para mejorar los tiempos de respuesta; una permanente capacitación en materia de educación financiera, fomento del buen hábito de pago y un trabajo conjunto con los gremios y entes territoriales para conocer de primera mano las necesidades de nuestros clientes.
Ha sido un esfuerzo integral que esperamos dinamice el mercado y permita que la reactivación económica sea un hecho tangible. Seguimos creyendo en el país, en la pujanza de su gente y en la importancia de creer. Seguiremos cumpliendo con nuestra labor de fomento porque más allá de los números, también nos mueve la vocación de servicio por el campo y la ciudad. Y sabemos que estos nuevos recursos serán la oportunidad para que miles de colombianos tengan la oportunidad de materializar sus proyectos.