Analistas 11/07/2024

Sin propósito ni dirección

Isaac Dyner
U. Jorge Tadeo Lozano - Presidente Asociación Latinoamericana de Economía de la Energía

Lo más incomprensible de la transición energética colombiana es que no tiene propósito ni dirección. Lleva más de 10 años y no sabe para donde va ni, por supuesto, cuándo llegará. Solo escucho, por parte de unos, que debe hacerse lentamente, de no pocos, que todavía tenemos carbón para 150 años y, de algunos más, que se requiere más térmicas a gas y grandes hidroeléctricas.

¡Preocupante, pues estos argumentos falaces confunden, garantizan mantenernos pobres energéticamente y, sin lugar a duda, dificultan avances económicos y de bienestar! Además, de esos, no tendríamos 1 kWh nuevo antes de ocho años, aun dando un giro radical.

No he encontrado disenso en lo que respecta a nuestro pobre consumo eléctrico que, aun incrementado a 1.500 kWh per cápita en el último año, es bajo comparado con el de otros países de similares condiciones.

Esto inquieta pues, pese a nuestra complacencia, se debe conocer que economistas han evidenciado relacionamientos entre consumo eléctrico y variedad de variables, que incluyen crecimiento económico, bienestar y desarrollo humano; además, que este es afectado negativamente por su precio. Con la digitalización y la electrificación de la economía nuestro rezago se acentuará.

En este contexto, es un gran error establecer que cómo nuestra matriz eléctrica es tan baja en emisiones pues, entonces, tomémonosla con calma. Contaminando un poquitín más, no corregiremos nada. No solo terminaremos haciendo daño a los ecosistemas, sino, además, más atrasados que el resto y también, posiblemente, más inequitativos.

El tema de la nueva Ley es importante, pero el tiempo es insuficiente

Esperemos que este imaginario no acontezca, pero, con certeza, si nos hará llegar más tarde y desordenadamente.

Todos los países están realizando su transición energética de manera acelerada porque solo trae ventajas - más allá de las ambientales. De manera equívoca se utiliza a China e India como contraejemplos. Se confunden, China es la nación que, de lejos, tiene más capacidad instalada de electricidad renovable. Ella creció tres veces en diez años para llegar a la impresionante cifra de 1.400 GW, superando a todas las demás en 2023. Por su parte, India, aunque detrás de China, viene a toda marcha.

Es que es menester determinar tanto el stock como la velocidad. Estamos en otro mundo, con energía barata, descentralizada, con retos que todos superarán y, además, en donde los aventajados venderán productos y servicios a los quedados, como nosotros. Dilaciones en la transición eléctrica traerá consecuencias negativas en los demás sectores de la economía y la sociedad. Por ejemplo, en temas de desabastecimiento de la Costa Caribe y Bogotá.

Además, en transporte, con los problemas de contaminación de las ciudades como Bogotá y Medellín. Se requiere, entonces, de manera urgente, darle dirección al proceso y definir metas volantes a 2030 y 2035 con miras a 2050.

El tema de la nueva Ley es importante, pero el tiempo es insuficiente. Lo importante ahora es completar los 6 GW del PND, adicionados a los 4GW que vienen del gobierno anterior. A esto hay que sumarle nuevas subastas de solar y eólicas y que, en menor escala, incluyan geotermia, biomasa y almacenamiento. Con esto, que no es fácil, por un lado, el presidente Petro pasará a la historia y por el otro, por si fuera poco, ¡el país ganará!

TEMAS


Ahorro de energía - transición energética - Carbón