Cuando hablamos de trabajo híbrido y flexible, una cosa es cierta: no estamos de acuerdo sobre cómo vamos. Empleados y empleadores están divididos. Venimos de una profunda disrupción del mercado del trabajo, en la cual millones de personas dejaron sus puestos en busca de un mejor “por qué” trabajar. Se produjo un gran replanteamiento: en América Latina, el 74% de los empleados consultados por Microsoft a inicios de 2022 declaró que su prioridad era el bienestar por encima del trabajo, y casi la mitad de ellos estaba contemplando cambiar de puesto para trabajar en una empresa que se ajustara más a sus prioridades y valores.
Han pasado casi tres años y aún vemos cómo se están produciendo ajustes en el dónde, cómo y cuándo trabajamos. El Índice de Tendencias Laborales muestra que aún existe una desconexión entre los colaboradores y los líderes: no nos ponemos de acuerdo sobre aspectos cómo medir la productividad, qué significa la flexibilidad y cuál debe ser el papel de la oficina en un ambiente laboral cada vez más híbrido.
La paranoia de la productividad dificulta el trabajo híbrido. El 87% de los colaboradores dice ser más productivo en esquemas híbridos o remotos, mientras que solo 12% de los líderes dicen sentir plena confianza en la productividad de sus colaboradores en esa modalidad. La paranoia de la productividad corre el riesgo de hacer insostenible el trabajo híbrido. Los líderes deben pasar de preocuparse por si su gente está trabajando lo suficiente para ayudarlos a concentrarse en el trabajo que es más importante. El 81% de los empleados dice que es importante que sus gerentes los ayuden a priorizar su carga de trabajo, pero menos de un tercio (31%) dice que sus gerentes rara vez han dado una orientación clara durante el uno a uno.
Líderes empresariales y empleados deben encontrar los intereses en común. El 73% de los empleados afirma que necesita una buena razón para ir a la oficina más allá de las expectativas de la compañía. La buena noticia es que para el 84% de los empleados, la perspectiva de socializar con sus colegas los motivaría a asistir y el 85% cree que una razón importante es reconstruir lazos con su equipo. La reconstrucción del capital social es un motivo poderoso y efectivo para que las personas regresen a la oficina.