Tribuna Universitaria 22/06/2018

La innovación en la RSE

Uno de los fines de la Responsabilidad Social Empresarial (RSE) es la necesidad de acrecentar el bienestar público, medido en variables fundamentales de la vida en sociedad como la libertad, la igualdad, el bienestar y la seguridad.

Pero para poder llegar a ello es pertinente gozar de una debida disposición de recursos en pro del beneficio colectivo, que se traduce en maximizar el bienestar económico a la luz de índices de impacto macro como el progreso en los estándares laborales, optimas relaciones internacionales, estabilidad monetaria junto a una baja incertidumbre financiera, y crecimientos económicos escalonados.

En este último índice se encuentra como una variable de inmediata influencia la innovación en tecnología, en la medida en que esta significa la diferencia entre la prosperidad o el atraso por su relación directa con la productividad empresarial en sus diferentes escalas.

Lo anterior se entiende al pensar la productividad como punto de partida de una economía, en la cual movido por la innovación se conciben progresos en ciencia y tecnología, en identificación y satisfacción de necesidades, en efectividad y eficiencia de los procesos de mercadeo, distribución y servicio, así como mejoras en administración y networking.

A falta de lo anterior, en el largo plazo, tropezamos con la entrada en el círculo vicioso de la pobreza, en el cual de forma sucesiva la baja rentabilidad conlleva a una renta menguada; ésta genera incapacidad de invertir y ahorrar, provocando déficit en la acumulación de capital, que desencadena, una vez más, en un rendimiento reducido.

Por el contario, invertir en la innovación de ciencia, investigación básica, networking, tecnología y otros, reacciona en una productividad efectiva y eficiente, que a fin de cuentas, resulta en prosperidad para las nacionales, traducible no solo en altas utilidades empresariales, sino en mejoramiento de la calidad de vida de los empleados y su entorno.

En este punto es posible evidenciar que la realidad no se contradice, ya que si se invierte en capacitación laboral, en entornos de trabajo dignos, en mejorar las experiencias de mercado de los clientes y en hacer el mercado más consciente de la satisfacción efectiva de las necesidades sociales (es decir RSE), se logra a su vez un mayor beneficio real y concreto para la empresa, lo que demuestra que la RSE más allá de ser una conducta ética y legal es, en juicio del Banco Mundial, una verdadera estrategia empresarial, que significa mayor productividad, lealtad del cliente, acceso a mercados y credibilidad.

Es así como la innovación empresarial se manifiesta como una de las formas de RSE, ya que se adopta una postura activa y responsable para hacer negocios que garanticen un mayor desarrollo sostenible, en donde el crecimiento económico vaya en una misma dirección con el bienestar social y el uso responsable de los recursos naturales.

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RSE - Responsabilidad Social Empresarial - Competitividad - Innovación - Emprendimiento