Analistas 26/02/2024

NetZero

Jonathan Malagón
Presidente de Asobancaria

Medir y conocer nuestra huella de carbono es clave para tomar acción de cara a la crisis climática y al logro de las metas de descarbonización que tenemos como país. En 2020, se anunció el compromiso país de reducir las emisiones de gases efecto invernadero en 51% a 2030 y alcanzar la carbono-neutralidad en 2050. Esto, sin lugar a duda, nos convirtió en uno de los países con las metas más ambiciosas del Acuerdo de París.

Hay dos factores cruciales que se requieren para lograr estas metas. En primer lugar, el compromiso de todos los sectores y actores de la economía, tanto públicos como privados. Y es aquí donde el sector financiero juega un papel clave para la movilización y canalización de recursos que apalanquen la transición energética del sector real. En segundo lugar, debemos medirnos para gestionarnos. Este es un paso indispensable en la ruta al cero neto, ya que permite caracterizar e identificar los sectores a priorizar, establecer metas aterrizadas al contexto de Colombia, definir las estrategias de descarbonización y hacer seguimiento a la implementación.

Y, como lo que no se mide no se gestiona, el sector financiero ya empezó su tarea. La huella de carbono del sector financiero se genera casi en su totalidad en las actividades que financia, ya que las emisiones directas de los bancos son bastante bajas. Por esta razón, los mayores retos para la descarbonización del sector se encuentran en las emisiones financiadas de sus portafolios. Con esto en mente, el sector llevó a cabo el año pasado un proyecto para facilitar y acelerar la implementación de la ruta Net-Zero en emisiones financiadas.

Como resultado de este programa, mañana 27 de febrero, junto a la Embajada de Estados Unidos y el equipo de Usaid, se lanzará Calculadora NetZero para facilitar la medición de la huella de carbono. Específicamente, esta calculadora es una herramienta que le permitirá a las entidades financieras medir las emisiones de CO2 que financian en sus portafolios de créditos corporativos, proyectos productivos e hipotecas comerciales y residenciales, utilizando la metodología Pcaf (Partnership for Carbon Accounting Financials) y el estándar global SBTi (Science Based Targets initiative). Así, se homologarán las mediciones que ya venían haciendo algunas entidades y se incentivará la medición en los bancos que aún no lo hacen.

La siguiente tarea del sector financiero será, entonces, apoyar y transmitir la transición energética ofreciendo instrumentos financieros que apalanquen actividades de mitiga-ción y adaptación al cambio climático del resto de sectores de la economía. El llamado es al sector real, para que perfeccione su medición de emisiones y profundice su gestión hacia el objetivo país de la carbono-neutralidad.

TEMAS


Acuerdo de París - crisis climática - transición energética