Salud y salario: la apuesta del sector edificador
Como parte de la estrategia que estamos implementando para recobrar -poco a poco- nuestra vida productiva, hace cerca de dos semanas el presidente Iván Duque anunció el reinicio de actividades en el sector edificador. Este proceso se viene surtiendo de manera ordenada y responsable, teniendo como premisa la protección de la vida y la salud de los colombianos.
Ya vamos por la segunda semana de reapertura y los resultados son francamente buenos. Se trata de un proceso de reactivación que, aunque paulatino, avanza de manera decidida. El lunes 27 de abril reiniciamos actividades: adecuaciones de espacios, alistamiento, aprovisionamiento de materiales y algunos trabajos constructivos en 99 municipios de 19 departamentos. Finalizada la primera semana, el país había retomado actividades en 128 municipios. Hoy, contamos con 143 municipios con cierto grado de reactivación, lugares donde se concentra 90% de la actividad edificadora de Colombia. De esta manera, dos de cada tres proyectos ya están operando, cumpliendo -por supuesto- con los más estrictos protocolos de bioseguridad.
Sin embargo, dicho proceso tiene un nivel disímil de avance en las distintas regiones del país. Bogotá y departamentos como Santander, Quindío y Risaralda ya exhiben una tasa de reactivación de más de 90% de las obras registradas. En Nariño, Antioquia, Bolívar y Valle del Cauca esperamos alcanzar tales porcentajes esta semana, pues sus niveles de avance son cercanos a 70%.
En departamentos como Boyacá, Magdalena y Cesar, las tasas de reactivación no sobrepasan 50%, pero los últimos días han sido de una actividad creciente que permite avizorar un crecimiento paulatino. Así, semana a semana, seguiremos avanzando.
Las obras que ya reiniciaron tienen el potencial de proteger el empleo de más de 350.000 personas una vez se encuentren operando plenamente. Nuestra meta es clara: proteger más de medio millón de empleos durante el próximo mes.
Un elemento a destacar de estas primeras semanas es el uso masivo de medios de transporte alternativos, reduciendo así las aglomeraciones y evitando la saturación del transporte público. El compromiso de los colaboradores ha sido total. Estimamos que más de 60% de los trabajadores se desplazan a sus lugares de trabajo en bicicleta, moto o carro particular, porcentaje que incluso llega a más del 90% en algunos proyectos.
Estos resultados no hubieran sido posibles sin el apoyo de todos los actores involucrados en este proceso. En primer lugar, debe exaltarse el estupendo trabajo y liderazgo de las alcaldías, cuyo rol de vigilancia y control ha sido fundamental para garantizar el cumplimiento de los protocolos. En segundo lugar, el gran esfuerzo de las constructoras. Adecuar las obras para cumplir los protocolos no es una tarea sencilla, demanda enormes esfuerzos financieros y operativos que se han surtido de manera eficiente y responsable. Por supuesto, nada de esto sería posible sin los colaboradores. A ellos queremos no solo agradecerles por seguir edificando los sueños de miles de familias colombianas con dedicación y esmero, sino que queremos reiterarles el compromiso del presidente Iván Duque de seguir protegiendo su salud y su salario. En el Gobierno Nacional seguiremos trabajando, sin descanso, por este doble propósito.