El reconocido economista norteamericano Milton Friedman, ganador del Premio Nobel en 1976, popularizó una frase utilizada inicialmente en una novela del autor de ciencia ficción Robert Anson Heinlein. “No existe tal cosa como un almuerzo gratis”. El concepto se popularizó rápidamente en el mundo académico y económico, tanto así que en 1997, David Wolpert y William MacReady demostraron matemáticamente los teoremas NFL (conocidos así por las siglas en inglés: No Free Lunch). Las implicaciones científicas se han utilizado para los campos de optimización y aprendizaje supervisado. La idea básica es que no existe un algoritmo de optimización que se adapte a todos los problemas por igual. Esto sugiere que las cosas que parecen “gratuitas” siempre tendrán algún costo oculto o implícito para alguien, incluso si no es el individuo que recibe el beneficio.
La Corte Constitucional le dio un duro golpe esta semana al Gobierno Nacional al declarar inexequible la ley que creaba el Ministerio de la Igualdad. En el fallo dice que: “...el Congreso de la República incurrió en un vicio de procedimiento insubsanable: no llevó a cabo el análisis de impacto fiscal de la creación del Ministerio de Igualdad y Equidad, conforme a las exigencias previstas en el artículo 7º de la Ley 819 de 2003.” La decisión de la Corte es de una importancia mayúscula pues expone nuevamente un argumento financiero sobre los diferentes proyectos que cursan en el congreso.
Cada iniciativa debe tener un análisis del impacto fiscal. La ley dice que en todo momento, el impacto fiscal de cualquier proyecto de ley, ordenanza o acuerdo, que ordene gasto o que otorgue beneficios tributarios, deberá hacerse explícito y deberá ser compatible con el Marco Fiscal de Mediano Plazo. Para estos propósitos, deberá incluirse expresamente en la exposición de motivos previo a las votaciones y en el trámite de las ponencias los costos fiscales de la iniciativa y la fuente de ingreso adicional generada para el financiamiento de dicho costo. No hay almuerzo gratis. Alguien lo está pagando, probablemente usted, otro concepto que se popularizó en el sector de la tecnología y las redes sociales. Las suscripciones “sin costo” realmente no lo son, ya que los datos que se entregan a las plataformas constituyen una moneda de cambio para esas tecnologías.
Además de la parálisis de la agenda legislativa, las cuestionadas reformas deben pasar por el examen de la Ley 819 de 2003. El fallo de la Corte puede tumbar la totalidad de iniciativas gubernamentales, si la sala plena observa los mismos vicios en los otros trámites. Algunos congresistas de la oposición han venido alertando del mismo problema en varias reformas, ya que no es muy claro cuánto van a costar, ni de dónde se van a financiar en el largo plazo.
En su campaña electoral en Argentina, el hoy presidente Javier Milei, utilizó la explicación de Friedman de manera sistemática para atacar subsidios estatales y conceptos económicos que en teoría le parecen “gratuitos” a los ciudadanos. Nada es gratuito, todo tiene un costo en alguna parte del sistema económico. El concepto llegará a la campaña política de 2026 que ya la comenzó el propio gobierno. Aquel político que adopte la idea llevará una gran ventaja sobre los demás.