La reactivación económica, de la cual tanto se ha venido hablando en círculos políticos, académicos, periodísticos y empresariales debe ser una tarea común de toda la sociedad. Esta semana se conocieron propuestas concretas de generación de empleo de “choque” por parte de Fedesarrollo y Anif. Luis Fernando Mejía y Mauricio Santamaría, grandes y respetados economistas coinciden en muchos puntos de este plan que se debería ejecutar rápidamente. Asobancaria, Fenalco, Andi, SAC y otros gremios deberán unir esfuerzos junto a cámaras de comercio, ministerios, entes territoriales y empresarios independientes para empujar este duro piano que tenemos ahora en nuestra espalda.
Un verdadero pianoforte que parece no moverse. Sectores como la construcción o la minería siguen en negativo de doble dígito según cifras del Dane del primer trimestre. No cambia mucho el panorama del segundo trimestre con tantos días seguidos que tuvimos del agridulce e insípido paro nacional.
El reinicio de la máquina es tortuoso, complejo y muy difícil, pero hay que lograrlo. Así no estemos de acuerdo en el 100% de los detalles, todos los integrantes del aparato económico deben olvidar diferencias y remar para el mismo lado pues la corriente viene en contravía. Si nos quedamos quietos la economía se puede estancar por un largo período. Con mayores niveles de desempleo viene un menor nivel de consumo de los hogares. Lo que se necesita es justamente lo contrario.
Prender la máquina requiere un mayor nivel de inversión. Lo que más se necesita son nuevas empresas. Ojalá muchas vengan de otros países, de esa manera se podrán generar esos nuevos empleos. El análisis es bastante sencillo.
A mayor empleo, mayor consumo de hogares. A mayor consumo de hogares, viene crecimiento, así al principio sea solo crecimiento marginal del PIB. Mantener a la población ocupada y con ingresos es la fórmula fundamental de las grandes economías. El recaudo de la Dian subirá naturalmente sin tener que apretar a nadie, sin necesidad de una reforma tributaria dramática como la que presentó el mentiroso Alberto Carrasquilla. Sigue sin dar la cara al país por las falacias que dijo hace algunas semanas.
En el corto plazo la prioridad debe ser completar las fases del Plan Nacional de Vacunación. El ministro de Salud Ruiz ya puso una fecha tentativa para lograr inmunidad de rebaño en la primera semana de septiembre. Ese objetivo rápido se debe lograr también con apoyo unánime de todos los sectores. Cualquier rueda suelta que interfiera con el plan podría considerarse como una causa indirecta de un mayor potencial número de muertes. Creo que todos queremos pasar la página de la pandemia lo más rápido posible.
La reactivación también es mental, más allá de lo económico y empresarial. La gente debería rápidamente volver a gastar en turismo, entretenimiento y otros rubros, lo que genera flujos de dinero hacia todas las industrias. Unos dependen de otros. Los empresarios generan empleo y esos empleados generan consumo. En vez de reducir hay que ampliar. Se logra únicamente con la mentalidad adecuada. Nos toca creer a todos e imponer una agenda distinta a la de los que pretenden incendiar el país, únicamente por motivos electorales. Todos con toda y no todos contra todos.