La ideologización de la educación

La polémica que desde hace tres semanas se ha suscitado en el país a raíz de los problemas de financiación que tiene el Icetex, le ha causado al Gobierno un desgaste mayor. Primero, porque durante la campaña presidencial el entonces candidato Petro, ofreció la condonación de los créditos a los estudiantes y sus familias; segundo, porque el Icetex, creado en 1950 por el expresidente Mariano Ospina Pérez, se convirtió en el único vehículo para que hayan podido estudiar y estudien más de 5 millones de jóvenes, la mayoría de escasos recursos, quienes sin el crédito del Icetex no hubieran podido llegar a ser técnicos, tecnólogos o profesionales, ni hubieran podido acceder jamás a tener un trabajo calificado.

Los colombianos han constatado hasta dónde las posiciones ideológicas pueden hacer daño. El ministro de Educación, Daniel Rojas, distinguido por sus comentarios desacertados, no ha entendido su alta misión de contribuir a que las nuevas generaciones se eduquen y logren un futuro mejor. La posición del Ministro, dedicado a fustigar la misión prestamista del Icetex, es incomprensible; lo ha llevado a plantear que esta querida institución deje de recibir los millonarios recursos del presupuesto nacional, a través de los cuales se financia la educación de más de 90% de jóvenes de estratos 1, 2, 3, para quienes sería imposible de otra manera acceder a estudios superiores. ¿tiene ese planteamiento del Ministro de un gobierno de izquierda, alguna sensibilidad social? Su odio por el sector privado lo ha llevado a concebir que se acabe la financiación pública para los jóvenes estudiantes y que sean los ciudadanos particulares y los empresarios los que asuman esta financiación a través de los bancos privados; vale la pena recordarle al Ministro, cuya animadversión por el sector privado no oculta, que es con la plata de los impuestos que pagamos los ciudadanos particulares, incluyendo a los empresarios, que se financian y subsidian los programas sociales del país, entre ellos los del Icetex. También es bueno recordarle al Ministro que desde 1991 viene operando una fundación denominada Colfuturo, que ahora funciona con capital 100% privado, institución que presta, subsidia y condona créditos para que jóvenes profesionales estudien posgrados en el exterior.

El desprecio por la educación privada que profesa este Gobierno, no lo puede esconder el Ministro de Educación, porque en el fondo su propuesta de no financiar más créditos con el presupuesto nacional es un golpe mortal a la educación privada superior en Colombia, la que este Gobierno desearía estatizar totalmente; sin embargo, no lo puede hacer porque no les es posible reemplazar 1.141.862 que son el número de cupos de las universidades privadas (datos del Snies), en universidades públicas y menos en un gobierno que se comprometió a crear 500.000 nuevos cupos en la universidad pública, promesa que no podrá cumplir.

Mientras que las metidas de pata del Ministro de Educación hacen daño al Gobierno y que se iniciaron cuando dijo que él nada tenía que ver con el Icetex, cuya junta directiva no se había dado cuenta que preside, el Ministro de Hacienda lo hizo quedar como un incompetente por no tramitar a tiempo los dineros correspondientes, y el presidente Petro tuvo que salir a enmendar la plana y afirmó que, por ahora, su Gobierno apropiará el dinero para financiar las matrículas de los de beneficiarios que se educan con los créditos del Icetex.

Sobre créditos nuevos para financiar a estudiantes que aspiran a estudiar en el primer semestre de 2025, el Gobierno no ha concretado nada. Amanecerá y veremos.