Analistas 14/11/2025

Salitre Mágico: un parque que se renueva para la ciudad

José Joaquín Ortiz García
Presidente de Joyco

Bogotá cuenta con un sistema de parques que refleja el compromiso institucional por mejorar la calidad de vida urbana. Detrás de esa política pública se encuentra el Instituto Distrital de Recreación y Deporte (Idrd). Su labor no solo se manifiesta en los parques de barrio o en los grandes escenarios del Simón Bolívar, sino también en aquellos proyectos donde la inversión privada, bajo un esquema de concesión, multiplica el alcance del esfuerzo público. Uno de los casos más destacados es el parque Salitre Mágico, cuya transformación actual simboliza cómo una alianza bien estructurada puede traducirse en infraestructura moderna, segura y sostenible al servicio de la comunidad.

El parque Salitre Mágico, ubicado en la avenida 68 con calle 63, forma parte del complejo recreativo más importante de la ciudad. Operado mediante una asociación público-privada de iniciativa privada sin recursos públicos, el contrato -identificado como “APP Nuevo Parque Salitre Mágico” (Contrato 3665 del 2019)- establece que el concesionario asume la financiación, diseño, construcción, mantenimiento, operación y explotación del parque durante el periodo contractual.

Este modelo permite que Bogotá cuente con infraestructura recreativa y deportiva de primer nivel sin comprometer recursos distritales, bajo la supervisión técnica y la vigilancia permanente del Idrd.

En su trayectoria, Salitre Mágico se ha consolidado como uno de los principales destinos de entretenimiento del país, con una afluencia anual que supera los 800.000 visitantes, y la meta de alcanzar el millón en los próximos años. Pero lo que hoy ocurre en sus instalaciones va más allá de la lógica de un parque de diversiones. Actualmente se ejecutan diez frentes de obra, todos orientados a modernizar y ampliar la infraestructura para el beneficio de los bogotanos.

El más representativo es el Centro de Entretenimiento Familiar (CEF), que se construye en el predio del antiguo Cici Aquapark, donde antes funcionaban las diferentes piscinas recreativas incluyendo la atracción principal de la piscina de olas. Allí se refuerza la estructura metálica existente, se renueva la cubierta y las fachadas laterales, y se pavimenta un área de 8.400 m2 que incluirá baterías de baños y se habilitará como un gran espacio multipropósito para eventos, recreación y actividades culturales.

A este frente se suman obras complementarias: las nuevas taquillas norte con tres puntos de acceso, una vía de servicio que mejora la circulación interna, el tanque de red contra incendios, el edificio Calle 63 con locales y servicios, y una zona deportiva con tres canchas multipropósito y dos canchas sintéticas de fútbol 5 iluminadas para uso nocturno.

Por su ubicación, accesibilidad y entorno al aire libre, se convertirán en unas de las mejores de la ciudad. El proyecto incluye además un gimnasio al aire libre, juegos infantiles, un sendero peatonal, bicicletero y una plazoleta multipropósito de 15.823 m2, pensada para eventos y actividades comunitarias. Todo el conjunto se complementa con un nuevo cerramiento que organiza los flujos de personas, mejora la seguridad y fortalece la imagen del parque.

Estas intervenciones se desarrollan sin interrumpir la operación del parque, gracias a la coordinación constante entre el Idrd, la concesión y los contratistas especializados. Desde la supervisión técnica, a cargo de Joyco SAS, se verifica que las obras se ejecuten conforme a los diseños aprobados, los estándares de calidad estructural y los cronogramas establecidos. Esa labor de control es esencial para asegurar que cada elemento construido se traduzca en bienestar para la ciudadanía.

El impacto de esta transformación trasciende las fronteras del parque. La integración del nuevo Salitre Mágico con el parque Simón Bolívar y con los demás equipamientos del eje recreativo del occidente bogotano consolida un corredor urbano de alto valor ambiental y social. Cada nueva cancha, cada sendero, cada metro cuadrado recuperado contribuye a una ciudad más activa y saludable, donde el espacio público vuelve a ser punto de encuentro entre la familia, el deporte y la recreación.

El proyecto demuestra que cuando las instituciones públicas, los operadores privados y los supervisores técnicos trabajan con objetivos comunes, la ciudad gana. El resultado es un parque renovado que seguirá siendo patrimonio emocional y recreativo de Bogotá: un ejemplo de infraestructura que se construye, se mantiene y se pone al servicio de la comunidad.

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Análisis - Salitre Mágico - Parques de diversiones