Colombia está en los ojos de todo el planeta. Hace unos días, la reconocida plataforma Tripadvisor reconoció a tres de sus ciudades, entre ellas Bogotá, como los mejores destinos del mundo para visitar. Asimismo, Cali fue elegida la anfitriona de la COP16, la destacada cumbre de Biodiversidad de la ONU que reunirá a más de 190 delegaciones en octubre y congregará alrededor de 12.000 personas.

Indudablemente, estas son noticias que dan esperanza y se convierten en señales para muchos sectores de brillar en lo que mejor saben hacer. Este es el caso de la industria gastronómica colombiana, que, si bien ha crecido mucho en los últimos años, aún se encuentra rezagada a otros conceptos de las cocinas internacionales.

¿Por qué no llevar los viches de nuestro Pacífico a otro nivel? ¿Por qué no soñar en que todo el mundo conozca nuestras delicias como lo son la lechona, las achiras, el cholao, los tamales de pipián, las empanadas de cambray, entre otras? Sin duda, Colombia tiene un universo por ofrecer en términos de gastronomía y el mundo necesita conocerlo.

El boom del turismo y la apertura del país como centro de eventos internacionales han traído consigo una enorme oportunidad para las cocinas nacionales. Nunca antes en la historia reciente, desde las lamentables décadas del auge del narcotráfico, el nombre de Colombia había estado en boca de todos. Hoy, su presencia es cada vez más relevante en el mapa mundial, y lo mejor, por razones que nos hinchan el corazón de orgullo.

Así pues, la invitación para quienes creemos en el poder y la magia de nuestros sabores es que hagamos de la innovación una filosofía de vida. La cocina colombiana tiene muchos universos para explorar debido a su diversidad y autenticidad, por lo tanto, este es el mejor momento para exaltarla. Como bien decía Steve Jobs, “la innovación es lo que distingue a un líder de los demás”, así que desde el sector debemos empezar a hacer la tarea.

El Banco de la República recientemente informó que en el último año el ingreso de divisas por turismo registró una cifra récord de crecimiento de 22,4%, en comparación con 2022, lo que ratifica que lo viene para la industria es enormemente desafiante. ¡Lo bueno está por venir!

Así que debemos prepararnos todos los días para recibir al mundo con nuestra mejor cara: Construir platos originales, destacar los sabores más autóctonos, entregar el mejor servicio al cliente y por qué no, apostarle a ideas sostenibles que vayan en consonancia con las nuevas tendencias y demandas del mercado. Indiscutiblemente, desde La Guajira hasta el Amazonas, tenemos mucho por ofrecer.

La belleza de Colombia también está en el color de sus frutas, el olor de sus vegetales, la originalidad de sus licores y el sabor de todas sus carnes. Por eso, mostremos todo esto al mundo y convirtámonos en los mejores embajadores del país en nuestro territorio. ¡El momento es ahora!