Empoderamiento femenino
La igualdad de género es uno de los 17 Objetivos De Desarrollo sostenible propuestos por la ONU y una prioridad para el desarrollo de nuestra sociedad, es tan importante que, según la ONU Mujeres, si no se cumplen las metas de este objetivo, el número 5, difícilmente se pueden lograr las del resto.
Según datos del pacto mundial: “Las mujeres siguen careciendo de una representación igualitaria en la vida política, económica y pública y continúan siendo objeto de discriminación. Un ejemplo de esto es que, a 1 de enero de 2019, la representación de la mujer en los parlamentos nacionales era en promedio solo de 24,3%”.
Por cifras como la descrita en el párrafo anterior y como líder de Bivien, una organización cuyos productos buscan mejorar el bienestar y la calidad de vida de las personas y de las mujeres a través de diferentes programas de sostenibilidad y responsabilidad social, y a propósito del Día mundial de la Mujer que se celebra durante marzo, considero prioritario que las empresas inicien este viaje de empoderamiento e igualdad femenino y adopten algunas medidas para contribuir a eliminar esas brechas que siguen limitando a las mujeres en sectores tanto públicos como privados.
Cuando se trata de avanzar en la igualdad de género, las organizaciones tienen un papel importante que desempeñar y mucho que ganar, los caminos posibles son muchos, pero tenga en cuenta estos:
Desarrollen a nivel interno políticas y procedimiento que le garanticen a las mujeres los mismos derechos y oportunidades laborales, por ejemplo, garantizando que todas las políticas de la empresa incluyan la dimensión de género y que la cultura empresarial fomente la igualdad y la integración.
Ofrezcan oportunidades laborales para las mujeres dentro de las organizaciones es prioritario, aumentar el número de mujeres en cada nivel/posición dentro de la empresa, especialmente en puestos de alta responsabilidad y toma de decisiones.
Implementen con el apoyo del área de Gestión Humana de la organización un sistema de contratación y protección al empleado que integre la dimensión de género, y también que instauren una política de tolerancia cero hacia cualquier forma de violencia en el entorno laboral que contemple los abusos verbales y físicos. Elaboren un plan de formación en materia de género, que incluya temáticas como los derechos humanos y la no discriminación y que llegue a todos los departamentos y puestos de la empresa.
Por último, pero no menos importante, asegúrense de que sus productos o servicios no refuerzan los estereotipos de género.
Es evidente que a hoy existen menos barreras y que se ha logrado importantes avances en términos de igualdad, pero queda mucho por recorrer, es necesario contar con más empresarios comprometidos genuinamente por forjar las bases de un país mas próspero y equitativo y que les permita a las mujeres experimentar una igualdad de derechos real.
Queremos ver a más mujeres brillando, se ha demostrado una y otra vez que empoderarlas tiene un efecto multiplicador y promueve el crecimiento económico y el desarrollo a nivel mundial.