Hace unos días se anunció el cierre de Buzzfeed News, la plataforma informativa que hace parte de Buzzfeed, uno de los creadores de contenido más influyentes de la última década. Quizás a muchos no les suene tanto el nombre, pero sí les sonará Tasty, un formato que revolucionó la manera de presentar las recetas de cocina. Así como Quizzes o Lists, formatos que se convirtieron en la manera como la gente se aproximaba a la información a partir de pequeños tests o listas de los puntos clave de una temática.

Buzzfeed se hizo famoso porque creó un modelo por medio del cual todo el contenido se creaba, luego se distribuía y, según el impacto que tenía, servía para aprender y así adaptarlo cada vez mejor a los intereses y forma de consumo de los usuarios Este modelo estaba basado en tres factores esenciales: talento, tecnología y datos. Buzzfeed fue uno de los pioneros en usar la data para mejorar los contenidos.

Estamos hablando de mediados de la década pasada y si bien hoy en el mundo se usa más data, la forma de generar los contenidos hoy pasa mucho más por los algoritmos que por el talento.

En estos últimos años, las plataformas de redes sociales le han dado mucho más peso a los influenciadores. El entorno político se ha radicalizado mucho más. Twitter cambió de dueño sin un modelo de funcionamiento aún claro. Buzzfeed había logrado navegar en esos mares complicados con un periodismo hecho a su manera, con un lenguaje poco convencional, pero con un nivel de seriedad que le mereció el premio Pulitzer en 2021 por un reportaje sobre los campos de detención para musulmanes en China, y varias nominaciones en los años anteriores.

La razón que ha motivado la desaparición de Buzzfeed News y la crisis en otros medios similares como Vice o Playground, está en el modelo de negocio que está sustentado en el tráfico que llega a través de las redes sociales. Ese tráfico posibilitaba la venta de publicidad. Hoy parece que los medios que sobreviven son los que han logrado migrar a un modelo de pago.

Los nuevos algoritmos de las redes sociales hacen que contenido como el de Buzzfeed no logre la exponencialidad necesaria. En gran parte porque, como hemos visto, las redes sociales, lideradas por el fenómeno TikTok, han migrado del contenido de fuentes que la gente seguía a algoritmos basados en el entretenimiento y en mantener la atención de las personas.

Hay quienes consideran que los modelos de lenguaje basados en la inteligencia artificial llenarán las redes sociales de contenido generado de manera automática. ChatGPT puede crear contenidos tal como los queremos oír, con la postura política que nos gusta, sin mediación alguna de la mirada crítica y menos de la ética.

Así nos puede llegar un contenido que nos guste y nos atrape por la forma como está construido. Lo que no hará nunca será tomar el riesgo de ir hasta los campos de detención musulmana en China para contrastar la información y hacer un análisis juicioso de los datos.

Buzzfeed News, que nos enseñó que la forma podía hacer una gran diferencia porque facilitaba el acceso a la información, puede ser que ahora termine siendo desplazada por los algoritmos y la inteligencia artificial que, como sabemos, más que periodismo real, lo que mejor sabe hacer es encontrar la forma más atractiva de presentar la información. Así que la forma está por ganar la batalla. Del fondo ni hablemos.