Con un presupuesto desfinanciado en más de $20 billones, el gobierno se empeña en hablar de $12 billones que buscarían con una ley de financiamiento, que trae una combinación de cambios tributarios y de la regla fiscal. Esa jugada, es sencillamente más deuda para el país, pignorada por unas cifras irreales que ajustarán en el Marco Fiscal de Mediano Plazo para solicitar más crédito.
Analizando los mensajes del gobierno de lo que sería la nueva reforma tributaria, al parecer no van a favor de la conquista de $12 billones de nuestros bolsillos, sino de una cifra inferior. Han dicho que van a bajar el impuesto a la renta, de la tarifa de 35% a 30%, es decir menos recaudo. Cada punto de renta vale aproximadamente $3 billones. El efecto, si lo hacen progresivo, solo comenzaría a partir de 2026, ya cuando este gobierno va de salida, y cuando se implementaría la subida de la tasa mínima de tributación que proponen.
Otro mensaje es sobre el IVA, dicen que le van a subir el IVA de 5% a 19% a los vehículos híbridos, generando un mayor valor y, por ende, llevando a los que pueden comprarlos a vehículos más económicas como los de combustión. También dicen que pondrían IVA a Airbnb, cuando ya existe y ya lo pagan desde 2018, ese cambio lo trajo la reforma tributaria de 2016.
También buscan subir el impuesto de ganancia ocasional 5% adicional, cuando está plenamente comprobado que entre más alto este impuesto, menos recaudo genera.
Continúa el asedio al sector minero y de hidrocarburos, manteniéndole la tarifa de renta de 35% y subiendo el impuesto al carbono; parece que no conocen los datos del sector, cada vez hay menos contribuyentes y ese cambio generaría menos dividendos para los accionistas de Ecopetrol, pero sí más impuestos para la empresa. Ahora, el efecto cierto es que Ecopetrol va tener que anticiparle retenciones al gobierno, es decir, se convierten en la chequera para el jolgorio de gasto que tienen.
Plantean eliminar el simple, que crece y crece en el recaudo de 2024, y que sus cifras prueban que entre más sencillo el sistema tributario, más informales se suman y más recaudo se genera. Hoy, el simple ya superó el recaudo conseguido en todo 2023.
Exageran diciendo que van a fortalecer la lucha contra la evasión, a través de recompensas para quienes denuncien, cuando hace muchos años la Dian ha logrado tener un análisis en la materia, probando que pagar por esa información no es eficiente. Para que un ciudadano pueda recibir un dinero por denunciar, se debe haber agotado la vía gubernativa y contenciosa administrativa. Dicho, en otros términos, nadie puede recibir una recompensa con solo la denuncia, se debe lograr probar que esa información generó una decisión. Un proceso para llegar a la decisión puede demorar más de siete años y en caso de que el gobierno pague una recompensa y el denunciado no sea sancionado, la Dian estaría cometiendo el delito de peculado.
Ya hemos visto cómo el equipo económico del gobierno se inventa cifras. Un ejemplo fueron los $15 billones de “litigios” tributarios, ahora se inventaron que necesitan $12 billones, y que para conseguirlos la aritmética no cuadra, sin embargo, esperemos que le presenten al Congreso una nueva fábula tributaria.