AvanCiencia: conectando ciencia con política, industria y sociedad
martes, 21 de octubre de 2025
Luis Antonio Orozco
Indica el capitán Alberto Ospina, creador de Colciencias, que “en el esfuerzo por cultivar y articular el capital humano que apoyara la gestión del Colciencias… otra estrategia consistió en impulsar la organización de la comunidad científica, en la forma de una asociación nacional, como lo habían hecho otros países más avanzados.” El Capitán convocó a las universidades, recibiendo respuesta inmediata de Carlos Guerra, rector de la Universidad Industrial de Santander y un grupo de profesores liderados por Carlos Pérez y Gabriel García. Teniendo como referente la Sociedad Americana para el Avance de la Ciencia, Aaas, el 9 de octubre de 1970 se firmó en Bucaramanga el acta de constitución de la Asociación Colombiana para el Avance de la Ciencia, Acac, hoy AvanCiencia, para promover el desarrollo científico-tecnológico en Colombia y fortalecer el vínculo entre ciencia, educación, industria, política, sociedad y cultura, representando a la comunidad científica de la sociedad civil organizada.
AvanCiencia pronto se convirtió en motor de cambio. En 1972 organizó la primera Convención Científica Nacional y en 1977 lanzó la revista Prociencia que se convertiría en referente de divulgación científica. En 1979 presentó al gobierno el primer Plan de Desarrollo de Ciencia y Tecnología del país y en los años siguientes posicionó la Convención Científica como espacio de reunión de la investigación. En 1989 creó ExpoCiencia, un evento que se legitimó como lugar de encuentro de todo un país, desde niños con sus proyectos y olimpiadas; grupos, centros e institutos de investigación con sus avances; universidades y empresas con sus programas e innovaciones, así como emprendimientos de base tecnológica y sus ruedas de negocio.
Con el liderazgo de Nohora Elizabeth Hoyos, como directora ejecutiva, y Eduardo Posada como presidente, AvanCiencia propuso la primera ley de ciencia, la Ley 29 de 1990. También participó en la Ley 30 de 1992 de Educación Superior. En 1990 AvanCiencia creó el Premio Nacional al Mérito Científico y como apoyo a la divulgación científica creó en 1992 la revista Innovación & Ciencia y se encargó de redactar la sección de ciencia de El Tiempo. En 1995 promovió el Premio a la Innovación Tecnológica Empresarial con Colciencias, Bancóldex, Tecnos y la CCB, siendo esta última la que incluyó a AvanCiencia en el Programa Jóvenes Emprendedores en 1999. Entre 1994 y 1997 materializó un centro interactivo de ciencia y tecnología al que llamó Maloka, el más grande de América Latina en su época. Para 1998 asesoró al MinEducación para promover la educación básica en ciencia y un año más tarde se unió al proyecto Idep para la innovación en la enseñanza de las ciencias en las escuelas. También organizó Escuela Siglo XXI Foro y Feria y realizó el Foro de Política Científica y Tecnológica que culminó con el documento “Bases para la definición de una política científica y tecnológica con función social para Colombia”. Eduardo Posada, presidente de AvanCiencia, recibió el premio El Colombiano Ejemplar en la categoría de Ciencia y Tecnología en 1999.
En la década de 2000 AvanCiencia se consolidó como articulador de capacidades de CTI a través de la gestión de convenios de cooperación entre una gran variedad de entidades de orden nacional e internacional, y contribuyó a la formación de más de 10.000 investigadores con programas para el fortalecimiento de capacidades científicas en temas como redacción de artículos y gestión de proyectos. En 2010 María Piedad Villaveces como directora ejecutiva, inició un proceso de transformación digital con tres plataformas para ofrecer servicios a los actores del Sistema Nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación. Cafeto, para evaluación de propuestas; Unísono, para la administración de proyectos; y Cima, para capacitaciones virtuales. Asimismo, consolidó la creación de diplomados y programas de capacitación. También lideró la orientación de AvanCiencia hacia la interfaz política-ciencia y la incidencia de la comunidad científica en políticas públicas.
En 2020 adoptó la sigla AvanCiencia con una apuesta de renovación que frenó la pandemia. Pese a la falta de apoyo del gobierno y carencia de financiamiento basal continuó con su misión, y en 2023 creó el Premio Alberto Ospina Taborda y al año siguiente realizó la Primera Convención Interfaz Política - Ciencia. En 2025 fui elegido presidente de AvanCiencia, y junto con Saya Garavito como nueva directora ejecutiva, hemos liderado la ampliación del radio de acción al legislativo. Entendiendo la importancia de la gobernanza anticipatoria y la prospectiva legislativa impulsada por Cepal, contribuimos desde AvanCiencia a la formulación del proyecto de ley 081 para crear la Comisión Legal sobre Ciencia, Tecnología, Innovación y Estudios de Futuros liderada por la representante Jennifer Pedraza y el senador Guido Echeverry. Asimismo, estamos lanzando con Cepal el Programa Nacional Interfaz Política-Ciencia para abrir y certificar espacios de diálogo entre investigadores y formuladores de políticas y legislaciones.
Durante 55 años AvanCiencia se ha consolidado como agente legítimo del ecosistema de educación, ciencia, tecnología, innovación, emprendimiento y cultura, dándonos la convicción de seguir conectando la ciencia con la política, la industria y la sociedad.