MinCiencias y el llamado de la Procuraduría por la eficiencia administrativa

Importantes avances de la física cuántica han venido en buena medida gracias a pensar lo impensable con experimentos mentales y carreras científicas basadas en matemáticas de papel y lápiz. El más célebre de los experimentos fue propuesto por Erwin Schrödinger en 1935, producto de sus discusiones con Albert Einstein sobre la interpretación de Copenhague en la que Niels Bohr y Werner Heisenberg afirmaban que los fenómenos subatómicos son indeterminados y que la observación misma altera el estado del sistema. Schrödinger, con la idea de exaltar lo absurdo de esa interpretación, propuso que un gato en una caja con un veneno puede estar vivo y muerto a la vez (superposición cuántica), hasta que se abra la caja. Pues bien, algo parecido es lo que pasa con la administración de MinCiencias y en particular con el manejo de el plan bienal de convocatorias para 2023 - 2024 por casi $3 billones de regalías.

Indica la columna anterior que unas de las motivaciones detrás de la iniciativa de acto legislativo 132 sobre las regalías es que los departamentos no reciben la distribución de los recursos y que esto se debe en buena parte a la pésima gestión de MinCiencias. La Procuraduría General de la Nación en su circular 008 del 16 de octubre de 2024 indica que solo 2 de 11 convocatorias tienen el proceso finalizado con la lista de elegibles para las decisiones del Ocad. También que la convocatoria más importante, la 37 para Megaproyectos Nacionales de CTI por medio billón de pesos, no se ha publicado. Finalmente, el Ministerio Público llama la atención sobre la forma de planificar el lanzamiento de las convocatorias. Están programadas casi simultáneamente, sin importar los problemas de sobrecarga operativa que pueden impedir la realización de los procesos de forma idónea y eficiente.

Esto trae al menos tres afectaciones. La primera es que no se cumple con la ejecución de las regalías y pone en riesgo la gobernanza justificando el proyecto de acto legislativo que busca eliminar el Ocad. La segunda es que obstaculiza el cumplimiento del Plan Nacional de Desarrollo. Pero lo más grave es que entorpece a los proponentes, a la misma comunidad científica, ya que el avance de la ciencia y la tecnología es tan acelerado, que la no oportuna asignación de recursos puede interferir en la planeación de los proyectos y sus objetivos de creación de nuevos conocimientos e innovaciones. Es por lo que la Procuraduría advierte “que los proyectos que se aprueben obedezcan a criterios de vigencia, oportunidad y no obsolescencia, conforme a los requerimientos y necesidades de las regiones beneficiarias”. También exhorta al MinCiencias a “ejercer la correcta supervisión a la ejecución del proyecto directamente o a través de terceros.” tema que requiere una profunda reflexión ya que lo que se ve de la punta del iceberg no es alentador y como esta columna ha indicado, existen en MinCiencias serios problemas de control.

Hace unas semanas el profesor Zheng-Tian Lu y su grupo de la Universidad de Ciencia y Tecnología de China informaron al mundo en la plataforma Arxiv que lograron mantener estados estables de la materia (átomos de iterbio enfriados cerca del cero absoluto y encapsulados en las fuerzas electromagnéticas de un láser) por 23 minutos, lo que abre una ventana para el diseño de dispositivos cuánticos -y demuestra que podemos ver el gato vivo por un buen lapso-. La Contraloría ya encontró hallazgos fiscales en MinCiencias por más de $10.000 millones como describió esta columna, y la Procuraduría tiene una investigación disciplinaria a la ministra Yesenia Olaya por su hoja de vida, que como señaló esta columna, tiene como ingrediente la tradicional estratagema corrupta de la puerta giratoria. Esperemos que cuando los entes de control abran por completo la caja no encuentren el gato muerto y a su enterradora firmando el acta de defunción de la ciencia para Colombia en el gobierno del cambio.