Educadores al tablero
Los resultados del estudio de Competitividad Departamental del Consejo Privado de Competitividad muestran una vez más la importancia de la formación de los maestros como pieza clave de la calidad de la educación. En efecto, los departamentos que tienen un porcentaje más alto de profesores en colegio oficiales con estudios de posgrado, son los que tienen mejor desempeño en las Pruebas Saber 11 de los estudiantes.
Hay una correlación importante entre el nivel de formación de los docentes y el desempeño académico de los estudiantes. Este dato debe ser tenido muy presente por parte de la ministra de Educación, Aurora Vergara, y su viceministro de educación básica, Oscar Sánchez, para que retomen las becas que en el gobierno Santos se dieron a los docentes para hacer maestrías en educación y que por desgracia el presidente Duque no continuó. Fecode, si quiere el mejoramiento de la educación en el país, una de las primeras exigencias debe hacer es la solicitud de mayor presupuesto estatal para la formación de docentes.
Veamos los números que nos dan una radiografía muy contundente del asunto. Boyacá tiene uno de los mejores resultados de los exámenes Saber 11 de los estudiantes de colegios oficiales con un puntaje promedio de 267. Y sus maestros de colegios oficiales tienen posgrado en 73%. Algo semejante pasa con Santander que tiene los mejores resultados en los exámenes Saber 11 de los estudiantes de colegios oficiales. Están a la cabeza del país con un promedio de puntaje de 269,95.
Y sus maestros de colegios oficiales tienen posgrado en 60%. Mientras que departamentos como el Valle del Cauca, el tercer departamento más importante en aporte al PIB en el país, muestra el caso contrario. El Valle tiene resultados en Saber 11 de los estudiantes de colegios oficiales de 255 puntos en promedio, en el puesto 17 del país, mientras que sus docentes sólo en 42% tienen posgrados, en el puesto 24 del país en la lista de formación de profesores. Se demuestra que hay una correlación entre los resultados de los estudiantes y la formación de sus profesores.
Colocar la agenda de la educación al centro de la acción del Gobierno es fundamental para que mejoremos la educación inicial, preescolar, básica y media. Este proceso pasa también por la cobertura. Por ejemplo, en el Valle del Cauca esta cobertura, medida por cociente entre el número de matriculados en primaria sobre la población entre 6 y 10 años, está en 76,5% en el puesto 31 del país. Debemos llegar en todo el país a los números del Tolima que están cerca a 100%.
Otro aspecto triste es el nivel de deserción de estudiantes en educación básica y media, evaluada como estudiantes que abandonan el sistema escolar antes de que finalice el año lectivo, como porcentaje de los alumnos matriculados. En Bogotá está en un 1,3%, mientras que el Valle del Cauca tiene una deserción de 4,5% y Putumayo con un 10,3% es el que tiene el peor indicador en el país.
El Gobierno debe colocar al centro de la agenda de la política pública la educación para todos y de calidad. Y comenzando por los niños y niñas del país. De lo contrario seguiremos generando brechas sociales y perdiendo la oportunidad de ganar en bienestar social.