El crecimiento pierde impulso en el primer mes de 2022
En los últimos días, el Dane publicó los resultados del Indicador de Seguimiento a la Economía para el mes de enero de 2022, así como los indicadores líderes de los sectores de industria y comercio. De manera habitual, los resultados contenían análisis con las variaciones mensuales, anuales y bienales con el fin de establecer el nivel alcanzado por la economía frente a lo registrado antes de la emergencia sanitaria.
En esta columna analizamos los resultados de esos indicadores para el primer mes de 2022. Estudiamos las dinámicas más relevantes que explicaron el desempeño de las actividades económicas. Con los datos más recientes, en Anif mantenemos el pronóstico de crecimiento para 2022, el producto se expandirá en el rango entre 3,7% y 4,1% y entre 3,1% y 3,5% en 2023.
Indicador de Seguimiento a la Economía
En enero de 2022, el Indicador de Seguimiento de la Economía (ISE) presentó un crecimiento de 7,8% respecto al mismo periodo del año anterior. Ese resultado es sustancialmente menor que el registrado en el mes de diciembre, que fue de 10,3%. En una línea similar, esa ralentización se observa con la variación intermensual que, en su serie corregida por efectos estacionales y de calendario, fue de -2,2%. Desde que inició la pandemia, solo se han observado otras dos contracciones de mayor magnitud, la de abril de 2020 y la de mayo de 2021, producto de las restricciones a la movilidad y del paro nacional.
Las actividades terciarias fueron las de mayor contribución a la variación total del índice, dado que tienen la mayor participación en el valor agregado, que ronda 68%. Así, en enero su contribución a la variación total del índice fue de 6,3pp. En términos intermensuales, registró una caída de 3,8%, frente a variaciones de 3,0% en diciembre de 2021 y de 0,8% en el mismo periodo del año anterior.
Al interior de esa agrupación, las actividades que mayor crecimiento registraron fueron las de comercio, transporte, alojamiento y servicios de comida, con 21,3%. Ese crecimiento obedece al buen desempeño del comercio en la venta de bebidas alcohólicas, prendas de vestir, utensilios y productos para el hogar. De forma similar, el transporte terrestre crece por aumentos en la movilización de toneladas y pasajeros. Por su parte, el alojamiento se vio beneficiado por el plan de vacunación y la eliminación de restricción de aforos, que fomentó el turismo interno, consolidando la costa caribe como destino preferido por los colombianos.
Igualmente, destaca el crecimiento de la actividad de información y comunicaciones con una variación de 18,4%. En su variación intermensual, presenta un decrecimiento de 0,3%. Resalta el despliegue de fibra óptica para aumentar la penetración de servicios de internet y el aumento de las ventas por derechos de transmisión. En una línea similar, los servicios de edición, producto del retorno a las aulas por parte de los colegios, reanudaron su normal operación a diferencia de 2021.
Contrarrestan el crecimiento las actividades financieras y de seguros, con una contracción de 28,8%, producto del pago programado a EPM como indemnización por la contingencia de Hidroituango de parte del sector asegurador.
La siguiente agregación de mayor contribución a la variación total del ISE, fue la de las actividades secundarias, con 1,8pp. En su variación intermensual, fueron las únicas con variación positiva, registrando un crecimiento de 2,0%. Al interior, la industria presenta crecimientos positivos, principalmente en actividades como fabricación de químicos básicos y productos farmacéuticos por mayores solicitudes y restablecimiento de los inventarios luego de la temporada festiva. En el caso de la construcción, este sector también presenta comportamientos positivos en los segmentos de edificaciones residenciales y no residenciales.
Finalmente, las actividades primarias moderan el crecimiento del ISE con una caída de 2,7%, contribuyendo con -0,3pp a la variación total del indicador. En su variación intermensual, de igual forma decrecen en 5,2%. Esa contracción responde a la caída en las actividades agropecuarias, especialmente en café pergamino, banano, arroz, plátano y yuca. En el caso de la explotación de minas y canteras presentan un leve crecimiento explicado por la mayor explotación de productos como el carbón, níquel y gas natural, pero compensado a la baja por la menor extracción de petróleo crudo, producto de la suspensión de operación de algunos pozos.
Tal como se ha mostrado en los últimos meses, la economía ha logrado superar los niveles observados antes de la emergencia sanitaria. En este momento, se encuentra 3,7 pp por encima del nivel observado en enero de 2020. Sin embargo, las actividades primarias aún se encuentran rezagadas con respecto a los niveles prepandemia. En efecto, esas actividades están a 10,6pp de los niveles observados en enero de 2020.
Comercio
Acorde con el buen desempeño de las actividades terciarias registrado en el ISE, el comercio minorista presentó en enero de 2022 una variación anual positiva de 20,9%. Comportamiento que se encuentra relacionado con el aumento generalizado de la demanda y del consumo de los hogares, así como también a un efecto estadístico de base.