La Gran Encuesta de Yanhaas, elaborada para la gran alianza de medios, es la primera medición que se hace después de que se conocieron los resultados de las elecciones parlamentarias del pasado 11 de marzo, en las cuales también se midieron fuerzas los candidatos más representativos de la derecha y la izquierda, Iván Duque y Gustavo Petro Urrego, quienes finalmente fueron los grandes ganadores de la jornada.
Este triunfo no solo está representado por la ventaja en número de votos que sacaron frente a sus oponentes (Martha Lucía Ramírez y Alejandro Ordóñez, en el caso de Duque; y Carlos Caicedo por el lado de Petro), sino porque picaron en punta en el comienzo de la verdadera campaña presidencial, gracias a la notoria exposición en medios de comunicación y, más importante, ante la opinión pública en general que tuvieron ambas figuras antes de los comicios de hace 10 días.
Sin lugar a dudas, el gran beneficiado de este ejercicio democrático fue el candidato del Centro Democrático, pues en menos de tres meses, pasó de 6% en intención de voto a llegar a 40%. Es decir que multiplicó sus votantes por siete y dejó rezagados a los demás candidatos, pues quien más se le acerca en este momento en el exalcalde de Bogotá, Gustavo Petro, quien llega a 24% de intención de voto.
El ascenso del exmandatario también fue significativo, ya que aumentó en 11 puntos la cantidad de personas que estarían dispuestas a votar por él en las elecciones.
Como era de esperarse, Sergio Fajardo, Humberto de La Calle y Germán Vargas Lleras se vieron afectados por la falta de protagonismo en estas últimas semanas y parte del apoyo que tenían se repartió entre los otros dos candidatos anunciados.
Quienes están en este carrera, deben tener en cuenta que este resultado, aunque importante, es prematuro, pues todavía restan casi nueve semanas para la primera vuelta, lo que significa una eternidad en política, pues cualquier cosa puede pasar de aquí a allá.
Por lo que ahora el reto para cada uno de ellos es diferente. Para Duque, por ejemplo, será mantenerse a la cabeza en las encuestas; mientras que para Fajardo, De la Calle y Vargas Lleras, lo importante es empezar a sumar votos para poder competirle a Petro y acceder a la segunda vuelta, que definirá en junio al sucesor del presidente Juan Manuel Santos.
Otro de los retos que tendrán los contendores será conquistar el voto en blanco. A pesar de que ha venido cayendo desde septiembre, cuando estaba en 23%, ese 13% de potenciales votantes puede ser un factor determinante para pasar a la segunda vuelta.
Hay que tener en cuenta otro aspecto muy importante de esta medición y es que, por primera vez, se está midiendo la intención de voto de los candidatos a la presidencia y de la vicepresidencia, debido a que todos ya definieron las fórmulas que los acompañarán por lo que resta de campaña.