Cuidemos la industria de capital privado
Recientemente, he tenido la gratificante oportunidad de participar en diversos espacios para discutir sobre el capital privado en Colombia y la región. Cada uno de estos encuentros ha tenido como objetivo fundamental conectar a gestores de fondos de capital e inversionistas locales e internacionales, con el propósito de seguir fomentando la inversión privada.
En cada ocasión, he podido reafirmar la importancia de estos vehículos de inversión y el impacto positivo que han tenido en la economía colombiana, impulsando el desarrollo, la generación de empleo y el crecimiento empresarial. Sin embargo, también he notado cómo la incertidumbre política afecta la confianza de potenciales inversores locales y extranjeros.
Para ponerlo en perspectiva, empresas y proyectos con presencia en Colombia han recibido un total de US$14.085 millones provenientes de fondos colombianos e internacionales en la última década, destacando las inversiones en los fondos de capital de infraestructura (US$6.300 millones), seguido de adquisición y crecimiento (US$3.500 millones) e inmobiliario (US$3.400 millones), según datos históricos reportados a ColCapital.
Estas cifras, además de potenciar el desarrollo económico del país, han generado más de 264.000 puestos de trabajo y han impactado más de 1.000 empresas en 28 de los 32 departamentos. Entonces, ante la situación de debates desestabilizadores, producto de las macro reformas, surge la pregunta: ¿Estamos como país en la posición de subestimar este tipo de inversión? La respuesta es un rotundo NO. Es crucial que nos mantengamos firmes ante este panorama incierto para asegurar un futuro prometedor en el mercado.
Así, podremos mantener y potenciar las inversiones en sectores estratégicos como infraestructura, energía, inmobiliario, y en aquellos que brindan soluciones de base tecnológica en el ecosistema de capital emprendedor.
Es importante recordar que la participación de los fondos de pensiones como principales inversionistas institucionales en la industria de capital privado, ha ayudado a fortalecer el mercado de capitales, pues estos han aportado el 38% de los compromisos de capital. En definitiva, su presencia y apuesta por la industria ha atraído a otros inversionistas como las multilaterales, bancas de desarrollo, y corporativos, y ha creado un ambiente propicio para el crecimiento de la economía. Esto ha contribuido a la sofisticación y desarrollo del mercado financiero en la región.
Esta industria seguirá prosperando siempre y cuando transmitamos mensajes de estabilidad. Debemos mantener a Colombia en el ranking de los principales mercados para invertir en Latinoamérica. Según cifras de Lavca, a diciembre de 2022, Colombia ocupó el segundo lugar después de Brasil en términos de despliegue de capital, con un total de US$3.855,1 millones y 153 transacciones, presentando un crecimiento de 7,5% respecto al año anterior.
No dejemos que la incertidumbre desvíe el rumbo que hemos trazado y miremos hacia adelante con optimismo y determinación. Cuidemos este crecimiento exponencial y sigamos fortaleciendo nuestro valioso ecosistema de capital privado. Si perseveramos, impulsaremos aún más la inversión para el mercado colombiano, atrayendo mayor capital, más actores locales e internacionales, aliados estratégicos e inversionistas institucionales que le apuesten al país. ¡Amanecerá y veremos!