Retos para las ciudades
A tres semanas de la realización de La Cumbre Mundial de alcaldes de C40, hablar de medioambiente puede sonar crítico y desalentador. Hasta ahora son limitados los resultados de los esfuerzos mundiales para la mitigación del cambio climático, y en un corto tiempo, podemos llegar a vivir una nueva crisis de salud pública para la sociedad.
La Organización Mundial de la Salud, por ejemplo, calcula que serán 250.000 muertes anuales las que vivirá el mundo en los próximos años, 95.000 por desnutrición infantil, 60.000 por paludismo, 48.000 por enfermedades diarreicas y 38.000 por olas de calor, esto, sin contar aquellos efectos negativos que dichos cambios generan en la salud de las personas.
La promesa de creación de 50 millones de empleos verdes se convierte entonces en uno de los principales objetivos insignia de las ciudades que conformamos el C40, y que vemos en la restructuración de bienestar social, la oportunidad de mejorar la vida de sus habitantes y aportar en gran medida en la lucha contra el cambio climático. Lo anterior, con el fin de convertir las urbes en artífices de cambios y promotores de desarrollo en un contexto donde hoy, convergen en la sociedad, desde pandemias y guerras hasta la salud del planeta.
Desde Novo Nordisk, empresa líder mundial en el cuidado de la salud, vemos este panorama, retador para las ciudades, pero una oportunidad para reflexionar alrededor de los planes de desarrollo que se trazan, para que, pensando en este contexto, le demos una mayor visibilidad a problemáticas como: obesidad, sobrepeso y diabetes, que serán temas de la agenda mundial en los próximos años y que sin lugar a duda tienen una correlación estrecha con el progreso de nuestras ciudades.
Los colombianos estamos en el momento justo de hacer un alto en el camino, alinear políticas públicas y privadas, fijando una ruta donde nos sensibilicemos de la importancia de prevenir enfermedades y tratarlas oportunamente. Así como unir esfuerzos para lograr los Objetivos de Desarrollo Sostenible y que las ciudades sean motores de desarrollo, salud, y bienestar en un mundo que es cada vez más urbano. La salud urbana sigue siendo un capítulo por construir que también tiene relaciones profundas con el medio ambiente.
Levantamos la mano para que las principales ciudades del mundo, que están comprometidas contra el cambio climático, se conviertan en punto estratégicos para crear iniciativas que impacten positivamente a las urbes y sus ciudadanos. Nosotros ya estamos contribuyendo y lo hacemos desde la ciencia, ampliando el acceso a nuestros medicamentos y trabajando para prevenir y, en última instancia, curar estas enfermedades, pero necesitamos manos que nos ayuden a crear conciencia sobre la obesidad, sobrepeso y diabetes, pandemias silenciosas a las que aún no se les ha puesto la atención del caso.
Seguiremos contribuyendo para que entendamos la salud de una manera más integral en su relación con el desarrollo urbano y los retos que tenemos en materia ambiental. La cumbre del C40 ha demostrado que el cambio climático es el mayor desafío que tenemos como humanidad.