Por qué hacemos lo que hacemos
Este fin de semana tuve la oportunidad de asistir al evento de Tony Robbins UPW, donde participamos 40.000 personas de más de 150 países. Para los que no conocen a Tony es uno de los coaches más reconocidos en el mundo, coach del expresidente Clinton, de Oprah, de deportistas y celebridades. Tiene un documental en Netflix “No soy tu Gurú”.
Una de las herramientas más interesantes aprendida en este evento es conocer por qué todos en el mundo hacen lo que hacen, por qué hay gente que reacciona de una forma, o se vuelve adicto a algo, o tiene un tipo de relación, o un tipo de negocio en particular. Él menciona que hay miles de historias por las que las personas hacen lo que hacen, pero que en realidad todas estas historias se pueden sintetizar en seis razones o motivos básicos.
Lo interesante es que estas 6 necesidades básicas las tenemos todos los seres humanos, pero el nivel de priorización de las mismas, o la aproximación o manejo que se les da puede ser negativo o positivo y crear una vida complemente diferente. A continuación, las comparto con la intención de que el lector pueda identificar cuáles son las que hoy manejan su vida.
Primera, la certeza. La certeza es esa necesidad de saberlo todo, cuándo, a qué hora, por qué, con quién, esto lo que le da a la persona es la sensación de control. Razón por la que vemos la misma película miles de veces, ya que estamos seguros de cómo termina y que no nos defraudará. El problema de esta necesidad mal manejada es que todos los días hay cambios, lo que entonces puede generar mucho estrés para la persona.
Segunda, la variedad. Cuando las personas tienen demasiada certeza sobre todo en la vida, esta se puede volver aburrida, y hay personas que le huyen a la rutina, razón por la cual se sabotean para tener una pareja estable, o se sabotean cambiando miles de veces de trabajo no logrando tener la suficiente experiencia o compromiso en un sitio cuando ya están saltando al próximo.
Tercero, la significancia. Todas las personas quieren ser reconocidas, importantes o especiales para alguien o para un grupo de personas. Esta es la necesidad que ha incrementado de forma exponencial por las redes sociales. El tema aquí, es que el reconocimiento o ser especiales, muchas veces, puede llevar a ir contra los principios o valores, o generar comparaciones con los demás y envidias, si este no está conectado con otra necesidad básica como lo es la conexión real o la contribución.
Cuarto, la conexión o el amor. Al final de la historia la mayoría de las personas hacen lo que hacen para sentirse amadas. Pero también podemos pretender satisfacer esta necesidad de la forma incorrecta, creyendo que la conexión es tener miles de seguidores o amigos en Facebook cuando sabemos que no son reales, o tener una pareja sin importar si nos hace mal. He visto cómo hay miles de matrimonios donde el amor no es lo que los conecta sino mostrar a los demás que cumplieron con el estándar de haberse casado.
Quinto, el crecimiento. Todos los seres humanos tienen la necesidad de crecer, es lo que da la sensación de progreso o de estar avanzando. Pero si el crecimiento se da sin bases sólidas se vuelve una casa de naipes, o se genera una competencia insana con los demás.
Finalmente, y tal vez la más importante, la contribución. Esta es una necesidad básica espiritual que tienen los seres humanos, de sentir que se deja huella en el planeta de alguna forma, también puede darse de forma positiva o negativa.
¿Cuál es la necesidad básica que hasta hoy ha movido tu vida? ¿Qué te ha costado? ¿Cómo podrías darle un mejor uso para ser feliz?