Antes reclutar y retener el talento era una tarea más sencilla, por cuanto las personas llevaban la hoja de vida a la empresa, se hacía una entrevista y esta persona podría durar en la empresa de 20 a más años. Esto ocurría porque el trabajo era visto como una oportunidad de estabilidad y tranquilidad para lograr tener un hogar, casa, carro, familia y una pensión. Pero en la medida en la tecnología fue transformando la cultura y por ende las dinámicas de comportamiento, la relación con el trabajo cambio, por lo que hoy nos encontramos ante un nuevo panorama. Adicionemos a esta ecuación la aparición del Covid como el “Acelerador digital”, en el que muchas personas hicieron consciencia de la relación entre el tiempo, pago, eficiencia, y los beneficios del trabajo remoto. Hoy, a raíz del Covid, es mucho más difícil retener el talento, así que aquí van algunos lineamientos para construir de forma conjunta nuevas estrategias para las áreas de Talento Humano.

Primero, si no hay un buen clima laboral, no hay posibilidad alguna que el talento de quede. Gracias a la tecnología las personas hoy pueden hacer comparaciones positivas o negativas, pueden observar como es el clima en otras empresas. Muchas veces esta información también se filtra por el “voz a voz” de personas que trabajan o trabajaron en empresa. Un ejemplo, una vez escuche una conversación entre cuatro personas sobre el clima de la empresa, en la que unos decían a los otros que trabajar en esa empresa era como estar en la película de los “juegos de hambre”. Creo que a nadie lo gustaría trabajar allí, y si lo hiciera seria por el suelto unos tres meses máximos y después continuaría con su camino. ¿Qué es tener un buen clima? Una empresa con buen clima es aquella en la que el respeto por los seres humanos está marcado por el liderazgo positivo, el trabajo en equipo, la comunicación asertiva, la creatividad y el equilibrio hogar trabajo. Donde se ha hecho una labor a profundidad por conocer a sus colaboradores y se han creado lineamientos, estrategias y planes de bienestar y felicidad laboral, donde también es posible crecer como persona y como profesional.

Segundo, los beneficios y el reconocimiento son importante para retener el talento. Igual como cualquier relación en la vida si no hay un trabajo constante de enamoramiento es posible que la relación entre en monotonía. En la relación laboral reconocer el buen trabajo de las personas ayuda a que se sientan que están aportando y están siendo vistas. También los beneficios ayudan a compensar a veces el salario. Dentro del listado de beneficios se puede destacar los siguientes: formación; guardería; planes para lograr comprar casa, carro o moto; seguros; gimnasio; clases de yoga; meditación o mindfulness entre otras. Pero en este caso lo mejor que puede hacer la empresa es preguntarles a sus colaboradores que sería un beneficio para ellos, ya que a veces se crean planes que no corresponden con lo que las personas necesitan.

Tercero, el emprendimiento inhouse como una forma de promover ideas y proyectos. Se debe tener en cuenta que en los últimos años se ha vendido el emprendimiento como algo que puede hacer cualquier persona y que algo fácil con lo que se pueden volver millonarios en unos cuantos meses. Dicha creencia es una de las principales razones por las que las empresas hoy tienen una alta rotación. En la práctica un emprendedor necesita de pasión y perseverancia, y esta última a veces no es tan común encontrarla, por eso la mayoría de los emprendimientos no pasan de los dos años. Entendiendo este fenómeno, las empresas pueden plantear programas y proyectos internos para los colaboradores en los que puedan emprender de mano de las empresas, lo que en ultimas sería un gana gana. Así que se recomienda la creación de programas de emprendimiento inhouse.