Los señores Angel Dzambaki, Eurodiputado búlgaro y Martin Helme exministro de finanzas de Estonia, en el documental 'El futuro de Europa' afirman que se está repitiendo la historia cuando la Unión Soviética URSS ejercía presión a Hungría, Estonia y Polonia, y manifiestan la inconformidad sobre la forma poco democrática de toma de decisiones en seno de la Unión Europea (UE) que, según ellos, está liderada por los países más ricos.
La burocracia, los procesos de contratación de personal poco clara e incluyente y la labor dictatorial de la UE, que se evidencia con casos como el de Rumania, que están pagando los costos más altos de la Unión Europea en energía y combustible con una situación económica difícil y donde los salarios son hasta 5 veces mas bajos que el promedio de la UE, tal como lo expresa el señor Aurelian Pavalescu, presidente del Partido Democrático Nacional Cristiano de Rumania.
Otro caso referido a las decisiones poco consensuadas lo hace el señor Vicenzo Sofo, Eurodiputado italiano, por la pérdida de la soberanía sanitaria europea y del liderazgo de la industria farmacéutica italiana debido a las decisiones de la Unión Europea que no los protegió; y al día de hoy 80% de los principios activos para la producción de medicamentos hay que importarlos de China e India.
Así mismo no se explican algunos líderes cómo sucedió en su momento la reunión de Angela Merkel, Canciller de Alemania, el presidente de Francia Emanuel Macron, Ursula von der Leyen, presidente de la Comisión Europea, con el señor Xi Jinpin, presidente de la República Popular China, para firmar un acuerdo sobre “Deslocalización Industrial hacia Asia” donde actividades industriales y agropecuarias se pudieran ir a China; proyecto que fue denegado por los gobiernos europeos por ser inconsulto e inconveniente a toda luces.
El Eurodiputado Presidente de ECR, Eurolat Hermann Tertsch, afirma que la UE tiene actitudes invasivas, sancionatorias y de castigo como se evidenció en el caso de Hungría, que se le quitaron € 9.000 millones para ayudas del COVID por no haber aceptado incluir en la educación sexual de los niños los asuntos LGTB, decisiones que no respetan la soberanía y en otros casos en desmedro de los planes y proyectos de los gobiernos.
Es plausible y claro el liderazgo de la Unión Europea en la Agenda 2030, que crea también oportunidades para Europa en otros continentes con el desarrollo de tecnologías y equipos no dependientes de petróleo y gas -que les venden los rusos-, así mismo genera a los países europeos posibilidades de inversiones en otros países para ser parte de la cadena de energías alternativas; pero también es cierto que algunos gobiernos europeos han expresado su inconformidad por la priorización y beneficios para las grandes multinacionales de países poderosos sobre las empresas e iniciativas locales y nacionales de cada país.
En la coyuntura geopolítica, las acciones de Rusia contra Ucrania y la posición más que prudente de la Unión Europea deja en el tintero la necesidad de una nueva constitución en la comunidad Económica Europea, donde de acuerdo con el Eurodiputado Hermann Tertsch se debe volver a la génesis que buscaba la paz entre los países europeos y la cooperación económica, reconociendo su historia, sus principios Cristianos y la democracia (situación esta que demoró la entrada de España durante el Franquismo), pero respetando la soberanía de cada país, la toma de decisiones colectivas en igualdad de condiciones para solucionar los problemas colectivos, pues los de cada país en particular se deben solucionar internamente.