La sorpresa de los últimos años no sólo en términos económicos sino también sociales, han sido los llamados influencers, una generación de empresarios digitales que ha transgredido muchas viejas prácticas logrando democratizar no solo las oportunidades sino también los sueños. Esta generación de jóvenes cuenta historias que trascienden cualquier nivel social, generando una onda expansiva de SÍ SE PUEDE en la población más joven de LATAM. Ellos reflejan la condición de un mundo en el que a pesar de la bulla aturdidora de los desesperanzados, SE PUEDE SER. Y aun con las carencias propias de aquel que ascendió a fuerza de obstáculos y portazos en la cara, han logrado opacar el silencio pasmoso de los empresarios tradicionales para transmitir mensajes que pueden llegar a toda la población en milésimas de segundos. No todos los mensajes ni las actuaciones son defendibles en medio de los parámetros normales de respeto, es por eso que muchos de ellos entendieron que sus empresas no permanecerán en el tiempo si no se alejan del facilísimo de la polémica.

Sin embargo, desde una generación de empresarios que han entregado su vida por sus compañías se mira con desdén e incredulidad a los creadores de contenido, es por esto que dejo algunas cifras y perspectivas para el 2023 sobre el mercado de los influencers:

1.Las compañías y sus marcas están siendo conscientes de que los creadores de contenido pueden ser absolutamente relevantes como socios de productos. Un reflejo de esto es el acuerdo realizado entre Dunkin Donuts y Charli D'Amelio para agregar una bebida con su nombre a su menú. En el 2023 veremos un aumento notable de este tipo de dinámicas y asociaciones entre grandes marcas e influencers.

2.Hootsuite, afirma que durante el 2023 se acelerará una transición impensada hace algún tiempo: las redes sociales tomarán el lugar de motores de búsqueda como Google, siendo los influencers los causantes de esta nueva realidad digital. Según Statista, a partir de enero de 2022, el 71% de los usuarios informaron haber comprado cuando se toparon con un producto mientras usaban la aplicación (TikTok). Por esto los dueños de empresas pequeñas que quieran sobrevivir deben conocer cómo posicionar su oferta en las redes.

3. ¿Pero cuáles redes sociales reinarán el 2023? El portal especializado Purpose Brand afirma que TikTok continuará su agresiva expansión, dándole cada vez más importancia a la oferta comercial. De hecho, el informe What’s Next de TikTok señala que este año las personas buscarán nuevas formas de alcanzar el éxito, la felicidad y el bienestar, y TikTok será una herramienta para encontrar esos propósitos. Vale referenciar que TikTok es la sexta red social con más usuarios a nivel mundial, pues 1.000 millones de personas forman parte de esa comunidad, aunque es un dato que solo tiene en cuenta a mayores de 18 años y por eso con certeza el número de usuarios de esta plataforma es mayor.

4. Los datos los consolida el Global Overview Report 2022, socializado por Hootsuite y We Are Social, y destaca que las redes con más usuarios actualmente son Facebook (Meta), con 2.910 millones, Youtube, con 2.562 millones, Whatsapp, con 2.000 millones, Instagram, con 1.478 millones y WeChat, con 1.263 millones.

5. Las empresas y los consumidores son cada vez más digitales. Y así lo evidencian las cifras de la Cámara Colombiana del Comercio Electrónico, que estima un crecimiento del 36% en 2022 con respecto al 2021 que movió cerca de $ 40 billones, un avance en el que las redes sociales y los influencers han tenido un rol preponderante. En el 2023, un año con perspectiva de crisis, la jugada más eficiente para las compañías será el mercado digital.

Los influencers son emprendedores digitales que resultan también trascendentales en la tarea de cambiar la visión del empresario como un personaje lejano y egoísta.

El reto está en que tanto los empresarios tradicionales como los emprendedores digitales entiendan que el cuento de liderar no consiste en “deslumbrar sino en inspirar”.

Post SCRIPTUM: Un estudio de McGraw Hill, analizó 600 compañías de 16 diferentes industrias de Estados Unidos durante el periodo de recesión de 1981 a 1982, y se encontró que las empresas que mantenían o incrementaban su inversión en publicidad presentaban un crecimiento en las ventas durante la crisis y hasta por un periodo de 3 a 5 años.