Para nadie es un secreto que Colombia se ha convertido en un lugar seductor para la inversión extranjera y, sin dudas, este positivo clima empresarial se relaciona con su estabilidad jurídica, social y económica. Gracias a esto, muchas compañías han encontrado un ambiente estratégico para llevar a cabo negocios con éxito, y muestra de ello es que en el último año una docena de empresas trajeron o abrieron sus operaciones regionales.

Este tipo de decisiones corporativas responden, en gran medida, al hecho de que Colombia ha sido reconocida como el primer país en América Latina en proteger al inversionista; el tercer destino más amigable para hacer negocios en la región por encima de Brasil o Ecuador según el proyecto de investigación Doing Business 2018 del Banco Mundial; y la tercera economía que atrae mayor inversión extranjera según el Ministerio de Comercio, Industria y Turismo. Sobre esto vale recordar que, 10 años atrás, más de la mitad de la inversión directa extranjera iba al sector minero-energético, y hoy el panorama ha cambiado.

Tomar la decisión de invertir, abrir o mover unidades operativas a Colombia varía según el sector. No obstante, me gustaría destacar tres factores que pueden ser determinantes.

Ubicación: Colombia cuenta con una posición geográfica privilegiada que ofrece un alto nivel de conectividad a nivel interno y externo. Aunque aún existen ciertas barreras, el país ha hecho grandes esfuerzos por desarrollar una infraestructura terrestre, marítima y aérea de primer nivel. Además, los proyectos 4G están logrando la integración de centros de producción y zonas portuarias, lo que disminuirá costes de logística y transporte.

Desempeño: gracias al adecuado manejo de la política fiscal y monetaria, y al incremento de la productividad laboral - 0,52 % el año pasado -, hoy las proyecciones de crecimiento del país son positivas y brindan confianza inversionista. Además, vale recordar que las estimaciones de crecimiento de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos para 2019 son de 3,3%. Así, se espera que este pronóstico permita superar el techo de crecimiento del PIB de Colombia de los últimos tres años (2%) y llevar al país a estar por encima del promedio regional.

Mercado: el mercado local ha experimentado un proceso de crecimiento sostenida gracias a la consolidación de la clase media. Según el Departamento Nacional de Planeación existe una clase media en expansión y consolidación, y se estima que el gasto mensual promedio de una persona de ingresos medios es de $750.000, cifra que representa grandes oportunidades en el mercado para las empresas.

Es claro que existen muchas más razones, sin embargo, las mencionadas son algunas que hemos podido evidenciar desde nuestro ingreso al mercado hace poco más de dos años. Durante este tiempo hemos encontrado que, a pesar de la alta regulación gubernamental en salud, Colombia está abierta a la generación de oportunidades, por esto, como empresarios debemos aprovechar el momento para tomar decisiones que potencien nuestras operaciones y convertirnos en un actor clave en la senda de progreso y desarrollo del país.