Hace algo más de 20 años, cuando desde la academia especialmente como profesor de cátedra de la facultad de arquitectura de la Universidad Javeriana y, desde la actividad empresarial como promotor inmobiliario y constructor, decidí de forma complementaria, trabajar desde la dirigencia gremial y cívica por Bogotá, he participado en labores por el mejoramiento de nuestra ciudad - región. Oficios que profesionalmente me llenan de satisfacción.
Presidí la Lonja de Propiedad Raíz de Bogotá; creamos con la Cámara de Comercio de Bogotá y los principales gremios empresariales de la región el Comité Intergremial de Bogotá - Cundinamarca siendo su primer presidente; creamos el Consejo Regional de Competitividad; presidí la Junta Directiva de la Cámara de Comercio de Bogotá; participé por años como representante del Alcalde Mayor en el Consejo Asesor de Patrimonio y en la Junta de Invest-in Bogotá; entre otras dignidades cívicas.
Pues bien, el nacimiento de ProBogotá Región, fundación creada por destacados empresarios del país con sede en esta ciudad, es otro instrumento que desde el sector privado busca un futuro promisorio de la ciudad, con el apoyo de la academia y de expertos. Escenario para planear el futuro de Bogotá con vista a 50 años. Necesaria iniciativa.
Hoy la capital de Colombia está sumida en una serie de problemas que requieren la atención institucional, con la participación del gobierno nacional, de la administración distrital y el liderazgo de los empresarios de la región. Para que la ciudad mejore su competitividad y por ende la calidad de vida de los ciudadanos, es perentorio mejorar la infraestructura y la movilidad, entre tantas necesidades. El planeamiento urbano y regional es un eje estructurante para la mejor utilización del territorio.
La ciudad - región cuenta con una población de ocho millones de habitantes y una economía pujante, tanto que participa en más del 25% del PIB colombiano. Por ello, genera la mayor cantidad de empleos y atrae importante inversión extranjera e interna; es el destino turístico más apetecido del país. No obstante, esta prosperidad genera contraste con la insuficiencia de servicios urbanos.
ProBogotá Región ha de ser entonces un vehículo para proponer estrategias para el mejoramiento de la región, para que nuevos proyectos empresariales y la formalización de la actividad empresarial, con responsabilidad social, beneficien a toda la población. La presencia como presidente de la junta directiva de la nueva institución de José Alejandro Cortés, líder progresista y muy apreciado en el sector empresarial, es prenda de trabajo serio y orientado al mejoramiento de Bogotá.
La nueva visión estratégica que se construya en este escenario, debe integrarse a los estamentos cívicos inicialmente mencionados. Propósitos no anunciados, pero fundamentales en esta gestión deben ser que la administración distrital tenga la gobernabilidad necesaria para ejecutar lo pertinente; la continuidad de las políticas públicas y de los proyectos estratégicos, y la seguridad jurídica.
Lo que no debe suceder, es que ProBogotá repita labores que otras entidades vienen estudiando y produciendo. Lo anterior, hilado al propósito nacional tendiente al desarrollo de las regiones, siendo Bogotá una de ellas, como la mayoría de las capitales de los departamentos del país que se vienen consolidando como ciudades - regiones atractivas y singulares.